Tremp, 31 muertos y un 'fuego' por controlar

El brote de Covid en la residencia de la Fundació Fiella en Tremp ha causado ya la muerte de 31 usuarios, cuatro de los cuales fallecieron desde el viernes. La cifra ha aumentado día tras día y supone dos de cada diez mayores que vivían en el centro antes del primer contagio, a finales de noviembre. Actualmente, solo un residente negativo sigue allí por su delicado estado de salud. El resto fueron trasladados la semana pasada a geriátricos de Guissona y La Pobla de Segur. Desde entonces, uno de los dos que ingresaron en la residencia de la Segarra ha dado positivo; mientras que uno de los seis trasladados al Centre Geriàtric del Pirineu ha fallecido. Algunas fuentes apuntaron a que este último se contó en principio entre los muertos por coronavirus, si bien el ayuntamiento de La Pobla lo descartó.

Fuentes de Salud valoraron que “ahora se tiene que apagar el fuego, pero luego habrá que mirar qué ha faltado”. En la misma línea se expresó la alcaldesa, Pilar Cases, que apuntó que más adelante “tendremos que averiguar qué pasó” para que “no vuelva a suceder”, porque “algún protocolo debió de fallar”. Apuntó que cuando supo del primer positivo, intentó hablar con la residencia y el domingo 22 contactó con la dirección “por si necesitaban algo”.

Uno de los dos usuarios sin Covid que fueron derivados al geriátrico de Guissona ha dado positivo ahora

Cases recordó que no fue el centro el que informó al ayuntamiento de la gravedad de la situación, sino que se enteraron a través de una tercera persona el miércoles de la semana pasada. Al día siguiente, el ayuntamiento llevó al geriátrico mascarillas, guantes, vasos y cubiertos de plástico, “todo lo que teníamos”, explicó la alcaldesa. También ofrecieron personal del consistorio. Señaló que la semana pasada, poco antes de la intervención, “ya había apoyo del Hospital de Tremp”.

El primer contagio conocido fue el de un trabajador de la residencia. A raíz de ese caso, el 20 de noviembre hubo un cribado a los residentes y empleados. A principios de la semana pasada eran positivos 49 de los 143 mayores y 8 de los 70 trabajadores. Hubo nuevas pruebas a los que habían dado negativo y los contagios se dispararon hasta 96 usuarios y 25 trabajadores. Esto llevó a que la conselleria de Salud interviniera la residencia el pasado fin de semana y puso al frente a Gestió de Serveis Sanitaris (GSS). A día de ayer había 100 mayores contagiados, 9 de ellos en el Hospital de Tremp, y 41 empleados positivos.

Fuentes solventes apuntaron que el centro sigue “falto de personal” y avanzaron que GSS, que mantiene el llamamiento para encontrar empleados, contratará mañana a 11 trabajadores más. Sindicatos también alertaron de la plantilla insuficiente y de que los que hay “no se acaban el trabajo”. Criticaron también la “opacidad” y preguntaron “por qué no llevan a usuarios a los hospitales de Lleida”. Otras fuentes sindicales señalaron que el Hospital del Pallars es el de referencia y “si nadie ha ido a Lleida es porque, por criterios médicos, no se ha considerado necesario”.

Desde el Patronato de la Fundació Fiella remarcaron esta semana que “han observado todos los protocolos sanitarios de seguridad, incluida la sectorización” y mostraron su dolor por los fallecidos. Aseguraron que se ha “hecho el máximo por el bien de los residentes”. El caso de Tremp ha vuelto a poner en evidencia el drama de las residencias, que acumulan casi la mitad de los muertos por coronavirus en Lleida, un porcentaje que también se repite en el conjunto de Catalunya y en España.

Fuentes de Salud insistieron en la necesidad de establecer unidades de convivencia y de formación continuada sobre Covid. Recordaron que han intensificado los cribados a empleados y que ahora son semanales. Asimismo, técnicos de la conselleria repasan los planes de contingencia de todas las residencias y han visto “cosas a mejorar” en algunas, como por ejemplo la sectorización, el uso de EPI y el lavado de manos. Señalaron que “si esto falla, puede suceder lo de Tremp”.

Cinco centros intervenidos hasta ahora La residencia Fiella de Tremp fue la quinta que la conselleria de Salud intervino en las comarcas de Lleida. El pasado fin de semana, el Govern puso la gestión en manos de Gestió de Serveis Sanitaris (GSS), cuando hasta entonces iba a cargo de la Fundació Fiella. También fueron intervenidas las residencias Mare Marcel·lina de Verdú, la Miniresidència Geriàtrica de Bellver y La Teva Llar de Lleida. Todos superaron los brotes que se detectaron y vuelven a estar clasificados como verdes (sin casos activos). El pasado verano fue intervenida la residencia privada de Alcarràs. En la demarcación hay ahora 62 residencias verdes. Trece tienen brotes (rojas) y en 12 hay casos pero están bajo control (naranjas). Entre todos los centros leridanos hay al menos 270 casos activos de coronavirus.