SEGRE

SUCESOS PATRIMONIO

Alcaldes de la Segarra denuncian vandalismo y daños en el patrimonio en el medio rural

Destrozan vallas en torno a un observatorio de aves en Torrefeta y roban otro cercado en Torà

Lo que queda de la valla de la Font de Cal Porta, en Torà.

Lo que queda de la valla de la Font de Cal Porta, en Torà.X. SANTESMASSEMS

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Alcaldes de la Segarra han denunciado destrozos en el patrimonio local en campo abierto por parte de desconocidos. Es el caso de Torrefeta i Florejacs, donde han aparecido destruidas las vallas de madera que protegían el mirador de aves de la Font de l’Espinal, en el espacio natural protegido de los Patamolls de Granollers. Según el alcalde, Josep Maria Castella, seguramente los destrozos se llevaron a cabo con mazos y se desconoce la autoría. El edil dijo que, al tratarse un paraje solitario situado a un kilómetro de Granollers, población donde en la actualidad vive una única familia, se hace difícil la vigilancia de estos equipamientos.

Los destrozos los descubrió un agricultor de la zona, ya que el mirador está situado junto al camino que comunica Granollers con Palou. Se trata de unos 25 metros de valla con vigas de madera que protegen las paredes del mirador y los paneles informativos, que explican las especies que se pueden hallar en el humedal. El entorno de los Patamolls de Granollers lo acondicionó la Generalitat en el marco de los trabajos para recuperar esta zona, afectada por los incendios que arrasaron 5.000 hectáreas en julio de 2009. Hace dos años el consistorio invirtió 1.500 euros en la renovación de los paneles informativos.

El entorno de Patamolls de Granollers es un espacio protegido y acondicionado tras los fuegos de 2009

El humedal es una zona de nidificación y refugio de una gran diversidad de aves como la aguilucho, el aguilucho cenizo, el carricero tordal, el esmerejón, el carbonero y el cernícalo, entre otros. Se nutre de la Font de l’Espinal y tiene 9,3 hectáreas de superficie de cañizos, juncos y robles, que combinan zona boscosa y cerealística en la Vall del Llobregós. Es un espacio PEIN que forma parte de la Red Natura 2000.

En Torà, además, desconocidos han robado parte de las vallas de madera del paraje de la Font de Cal Porta, a un kilómetro de la población. Los autores desmontaron el vallado situado junto a la carretera y se lo llevaron. El alcalde, Magí Coscollola, lamentó los hechos al tratarse de un punto habitual de paseo y recreo para la población.

Los dos municipios más extensos y difíciles de vigilar Torà y Torrefeta i Florejacs son los dos municipios más extensos de la Segarra. Los alcaldes, Josep Maria Castella y Magí Coscollola lamentaron que los robos y destrozos en el mobiliario y en los elementos de la arquitectura popular son habituales y difíciles de controlar por la extensión de los municipios.

Lo que queda de la valla de la Font de Cal Porta, en Torà.

Lo que queda de la valla de la Font de Cal Porta, en Torà.X. SANTESMASSEMS

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