El Pirineo apura el lleno de fin de año y prevé el resto de enero flojo en reservas

Establecimientos hoteleros y pistas de esquí del Pirineo apuran un fin de año con muy buena ocupación, ante la previsión de un resto de enero flojo en reservas debido a las restricciones por la pandemia. Según el presidente de la Federación de Hostelería de Lleida, Josep Castellarnau, la ocupación del fin de semana se ha ido reduciendo hasta un 70% cerca de las pistas de esquí, y en un 40% en área periféricas, un porcentaje que bajará a partir del lunes. Los bungalows están llenos todavía pese a la nieve pero se espera que la situación cambie en vísperas de Reyes y su ocupación baje al 40%. Según la responsable del sector, Marta Cortina, ha habido un aumento de turismo de autocaravanas. Por su parte, Jordi Ramon, presidente del sector del turismo rural, destacó que las reservas de fin de año han sido buenas pero que se han notado las limitaciones por la Covid, ya que se ha reducido estancias a dos días y la capacidad de alojamiento ha sido la mitad. Todos temen nuevos recortes por el aumento de contagios, lo que repercutirá en un enero flojo en turistas.

Por lo que respecta a las pistas de esquí, la inauguración ayer de la temporada en Andorra fue solo con esquiadores locales, por lo que norestó público a las de Lleida. En el Solsonès, la estación de Port del Comte, sí ha notado el cierre de las comarcas y de la Cerdanya y el Ripollés por el aumento de contagios del Covid. Ayer registró 1.700 esquiadores, el 70% de su capacidad total y la ocupación el alta en el hotel y el albergue. Las estaciones de FGC (Boí, Espot y Port Ainé) han registrado una media de 4.300 esquiadores diarios esta semana. Baqueira Beret contó también con numerosos aficionados.