Los Rurales siguen sin armas 4 años después del doble crimen de Aspa

Cuatro años después del doble crimen de Aspa, en el que los agentes rurales Xavier Ribes y David Iglesias fueron asesinados a tiros por un cazador, los miembros de este cuerpo aún no disponen de armas cortas ni defensas extensibles para protegerse. Y es que el reglamento que permite llevar armas a los Rurales, aprobado a finales de 2019 por la Generalitat, está paralizado porque el ministerio del Interior presentó un recurso al considerar que la competencia en cuanto a la materia de armas es estatal. La nueva normativa tenía que regular los requisitos para poder utilizar las armas, la formación, las condiciones y todas las medidas que sea necesario adoptar. Desde la Associació Professional d’Agents Rurals aseguraron ayer a este diario que “ahora solo podemos esperar a que se resuelva el proceso judicial” aunque, para garantizar la seguridad del cuerpo, también reivindicaron el desarrollo total del Plan Estratégico de Agentes Rurales y la convocatoria de nuevas plazas, porque “el cuerpo está envejecido, con una media de edad de 52 años”. Por su parte, CCOO reiteró su denuncia ante la “falta de recursos materiales y humanos que sufren los Rurales”. Si bien reconocen los esfuerzos de la conselleria de Agricultura en la creación del nuevo plan de actuación 2019-2024 y el reglamento de armas, critican que “la falta de efectivos y de elementos de defensa continúa siendo un problema real”. Del doble crimen de Aspa, el sindicato manifestó que cuatro años después “la Generalitat se ha negado a reconocer ninguna responsabilidad en este grave accidente laboral en acto de servicio”. Además del homenaje anual en la reserva natural de Mas de Melons, limitado este año por las restricciones de la pandemia, los compañeros de las víctima les recordaron ayer con un emotivo vídeo con dedicatorias.