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ADMINISTRACIÓN PROVINCIAL

Obligan a dos expresidentes de la Diputación a pagar por dietas irregulares de una directiva

Joan Reñé y Rosa Maria Perelló depositan los más de 4.000 euros que recibió la antigua coordinadora general || Exigencia del Tribunal de Cuentas mientras investiga el posible perjuicio a las arcas públicas

Imagen reciente de la fachada de la Diputación.

Imagen reciente de la fachada de la Diputación.ITMAR FABREGAT

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El Tribunal de Cuentas (TCU) ha obligado a los dos anteriores presidentes de la Diputación a pagar de sus bolsillos más de cuatro mil euros que la corporación provincial abonó a un alto cargo en concepto de dietas. El órgano fiscalizador ha abierto una investigación al considerarlas irregulares y, de entrada, ha exigido a Joan Reñé y Rosa Maria Perelló, ambos de JxCat, depositar de forma provisional la cantidad que se pagó de forma presuntamente indebida. Si la resolución final les exonera de responsabilidad, se les devolverá la suma depositada. De lo contrario, ese dinero servirá para resarcir el perjuicio a las arcas públicas.

El TCU inició su investigación a raíz de informes de la Diputación, que advirtió presuntas irregularidades en dietas a la entonces coordinadora general, Marlen Minguell. El órgano fiscalizador le atribuye el cobro de más de tres mil euros entre 2014 y 2018 como compensación de gastos por desplazamientos que ella solicitó “como si hubiera usado su vehículo particular, cuando en realidad los hizo en coche oficial”. Asimismo, apunta a algo más de 600 euros en dietas por viajes en 2018 que “no llegaron a realizarse”. Estos importes y los intereses acumulados suman 4.214 euros.

Exigir depósitos o avales para responder por presuntas responsabilidades contables es el proceder habitual del TCU. En este caso los reclama a Reñé y Perelló al ser superiores directos de Minguell. Les correspondía autorizar con su firma las solicitudes de dietas que presentaba la coordinadora general. Por ello les considera “responsables directos” a nivel económico, aunque no les acusa de ser conocedores de irregularidades y menos aún de cometerlas de forma deliberada. Perelló apuntó que “el Tribunal funciona así y hay que acatarlo” a la espera de resolución. Este diario intentó sin éxito contactar con Reñé.

Además de la investigación del TCU, la Diputación ha abierto de forma paralela su propio expediente para reclamar el reintegro de las cantidades que cree indebidamente pagadas.

Minguell ha rechazado devolver las dietas objeto de investigación, al considerar que las cobró de forma legítima y que la sospecha de irregularidades perjudica a su reputación. Ha presentado alegaciones y prepara un recurso contencioso-administrativo, al valorar que ha sufrido indefensión.

LAS CLAVES

  • Dos presidentes provinciales. Las dietas cuestionadas se pagaron entre 2014 y 2018, un periodo que abarca gran parte de la presidencia durante dos mandatos de Joan Reñé (2011-2018) y el inicio del de Rosa Maria Perelló (2018- 2019). Esta última relevó a Reñé cuando este renunció al cargo a raíz del ‘caso Boreas’ sobre presuntas contrataciones irregulares del ente provincial que sigue todavía en curso. La actual investigación del TCU no tiene relación con esa causa judicial.
  • Cuánto paga cada uno. Tras valorar en 4.214 euros el presunto perjuicio para las arcas públicas y señalar como responsables a nivel económico a los dos últimos expresidentes, el TCU les exigió depositar de antemano cantidades desiguales, en función del tiempo que estuvieron al frente de la Diputación. Así, el Tribunal reclamó a Reñé liquidar de forma provisional 3.555 euros; mientras que solo le exigió 568 euros a Perelló. Fuente próximas al proceso indicaron que estas cantidades están ya consignadas.
  • El inicio del proceso. El TCU abrió diligencias a raíz de una carta enviada por Perelló al ente fiscalizador en junio de 2019. En ella incluía un informe de Intervención del ente provincial que apuntaba a irregularidades en el pago de dietas.
  • Una reclamación paralela. Junto a la investigación en marcha del Tribunal de Cuentas, la Diputación ha abierto su propio proceso para reclamar el reintegro de las dietas que considera cobradas de forma indebida. Asimismo, la Diputación tiene la posibilidad de personarse en el proceso del TCU como parte afectada.
  • Rechaza devolver el dinero. La antigua coordinadora general ha rechazado devolver el dinero reclamado. Considera que cobró las dietas por desplazamientos de forma legítima, cree que la sospecha de irregularidades perjudica a su reputación y valora que ha sufrido indefensión. Por ello ha presentado alegaciones y prepara un recurso contencioso-administrativo.
  • Antes de nada, pagar. El TCU exige de antemano depósitos o avales para responder por presunta responsabilidad contable. Si la resolución final exonera a quien ya ha pagado, le devuelve el dinero. Si no, ingresa esa suma a la administración afectada. 
  • Dietas cuestionadas. El Tribunal apunta que hubo dietas para compensar gastos de viajes en vehículo particular que, en realidad, se hicieron en coche oficial. También afirma que se abonaron pagos por viajes que no llegaron a realizarse.
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