FAUNA SALVAJE
El Govern premia ideas para vigilar osos y cazar jabalíes
Convoca una “competición de innovación” para hallar tecnología con este fin || Recompensas en metálico y pruebas piloto
Corzos el pasado mes de febrero en la Segarra.
La Generalitat busca soluciones basadas en nuevas tecnologías para el control de la fauna salvaje, desde el seguimiento de osos y lobos hasta la detección y captura de jabalíes y otras especies de ungulados como los corzos. Con este fin ha convocado una “competición de innovación” que ofrece como incentivos premios de entre 2.000 y 15.000 euros, así como la puesta en marcha de pruebas piloto. Estará abierta hasta el 31 de mayo y se basará en cuatro “retos” propuestos por los Agentes Rurales.
El primero es mejorar el seguimiento de osos y otras especies que ofrecen los collares GPS actuales. Las bases de la competición recuerdan que ahora solo funcionan 2 o 3 años antes de quedarse sin batería. El segundo pretende implantar “sistemas automatizados” para ahuyentar a depredadores como osos y lobos, con el fin de evitar ataques a rebaños. Otro plantea el uso de “drones y otras tecnologías” para el control y captura de jabalíes y otros ungulados, poco después de que la Generalitat reconociera que la caza ya no basta para limitar su censo (ver SEGRE del 21 de febrero). Por último, plantean automatizar el control de acceso a espacios naturales protegidos.
Tres nuevos casos de triquinosis en carne de caza del Alt Urgell
El departamento de Salud confirmó ayer tres nuevos casos de triquinosis detectados en carne de jabalíes del Alt Urgell. Se trata de dos ejemplares abatidos en Ribera d’Urgellet y un tercero en Coll de Nargó.
Un establecimiento dedicado a la manipulación de carne de caza en Andalucía alertó sobre la presencia de triquinosis. Estos nuevos casos se suman a los dos del pasado febrero, hallados en ejemplares capturados en Montferrer i Castellbò y en Coll de Nargó.
Ante esta situación, las autoridades sanitarias instaron a extremar las precauciones y evitar el consumo de carne de caza que no haya pasado los controles que fija la normativa. Asimismo, recordó que congelarla no es suficiente para garantizar la desactivación de las larvas de triquina.
