TRANSPORTE PÚBLICO
Otra semana sin tren de La Pobla, que tendrá alarmas contra aludes
El convoy que descarriló el pasado día 12, trasladado a Lleida para repararlo
No habrá trenes entre Balaguer y La Pobla de Segur durante la próxima semana. Así lo avanzó ayer Ferrocarrils de la Generalitat (FGC), que indicó que, al menos hasta el 29 de marzo, llevará a cabo reparaciones tanto en el tramo de la línea afectado por el desprendimiento del pasado día 12; como en el convoy que descarriló al chocar contra las rocas. Este vehículo fue finalmente retirado el viernes del lugar del siniestro, entre Àger y Santa Linya. Una vez lo colocaron de nuevo sobre los raíles, circuló sin necesidad de remolcarlo hasta los talleres del Pla de Vilanoveta de Lleida.
A partir del día 29, FGC espera establecer una fecha para restablecer los trenes en toda la línea. Desde el accidente solo circulan entre Lleida y Balaguer; mientras que el trayecto entre la capital de la Noguera y La Pobla se hace en autocares. La operadora puntualizó que, aunque la reparación del convoy accidentado se prolongue, la vía estará lista para usarla la próxima semana. Esto permitirá que la temporada turística del Tren dels Llacs pueda comenzar a principios de abril, tal como está previsto.
FGC espera fijar una fecha para restablecer los trenes en toda la línea a partir del 29 de marzo
En cuanto a las obras en el tramo afectado en el desprendimiento, no se limitarán a despejar las vías y reponer las mallas antialudes que cedieron bajo el peso de más de mil metros cúbicos de rocas. Además de volver a instalarlas donde ya estaban, se desplegarán otras a una altura superior, en la cota cien. Además, este punto será el primero de la línea que incorporará una nueva medida para evitar accidentes.
Las nuevas mallas antialudes incorporarán sensores que se activarán ante la tensión provocada por el peso de un desprendimiento. Cuando esto suceda, emitirán una señal que advertirá del peligro a los maquinistas o incluso provocará la parada automática de los trenes, según avanzaron fuentes de Ferrocarrils.
Tras instalar sensores en la zona del desprendimiento, FGC espera extenderlos en las próximas semanas a otros tramos susceptibles de sufrir aludes. Los elegirá basándose en los estudios sobre la estabilidad de las laderas que está llevando a cabo el Institut Cartogràfic i Geològic de Catalunya (ICGC). Cabe recordar que las diputaciones de Lleida y Huesca impulsan también estudios geológicos para mejorar la seguridad en Mont-rebei, cerrado por un alud.