Alcoletge denuncia 'acoso inmobiliario' en un bloque de la Sareb con inquilinos y okupas

El ayuntamiento de Alcoletge y los vecinos de un bloque de viviendas sociales de la calle Ausiàs March de esta localidad denuncian “acoso inmobiliario” por parte del propietario del edificio, la Sociedad de Gestión de Activos de la Reestructuración Bancaria (Sareb). En el inmueble viven como inquilinos once familias, que aseguran que el mantenimiento es nulo, no hay reparaciones y los espacios comunes acumulan basura. Añadieron que llevan meses sin ascensor, lo que supone un problemas para las personas de edad avanzada y con discapacidades que residen allí. A estos habitantes se han sumado cinco familias de etnia gitana que han okupado otros tantos pisos en las últimas semanas.

Los inquilinos creen que el abandono del edificio por parte del banco malo es intencionado. “Lo que buscan es que nos cansemos y nos vayamos para poder vender los pisos”, afirman algunos afectados.

Todos tienen contratos de entre uno y dos años de duración, con alquileres que oscilan entre los 390 y 450 euros al mes, explicó uno de ellos. En cuanto a los okupas, operarios de Endesa acompañados de agentes de los Mossos cortaron ayer los empalmes ilegales a la red eléctrica que daban luz a las viviendas donde se han instalado.

El alcalde, Josep Maria Gras, explicó que unos días antes, el pasado domingo, les cortaron también el gas, pero apuntó que siguen teniendo agua al tratarse de un servicio municipal..

Desde diciembre de 2019 se han marchado 50 familias y solo quedan 11 arrendatarios de los 60

Estos no son los primeros cortes de servicios básicos en este bloque de viviendas. A finales de 2019, la Sareb ya cortó luz y agua a 60 familias de este mismo edificio en Nochebuena, aunque al poco tiempo se restablecieron por mediación del ayuntamiento. Desde entonces, se han marchado medio centenar de familias. El primer edil apuntó que en Alcoletge hay una continua demanda de viviendas a precio asequible, pero lamentó que no hay facilidades por parte de la Sareb para alquiler los pisos vacíos del bloque de la calle Ausiàs March (ver desglose).

Gras remarcó que la Sareb ha instado en ocasiones la suspensión del suministro eléctrico a inquilinos y okupas, y añadió que en los últimos días se ha trabajado para facilitar la convivencia vecinal, un objetivo que parece cumplido, destacó. A raíz de los cortes de luz de ayer, acudió al lugar el portavoz de la comunidad gitana de Lleida, Paco Salazar.

Este aseguró que las familias que han okupado pisos no tienen intención de abandonarlos. “Son jóvenes con niños, y precisan de un hogar que no encuentran porque las inmobiliarias no se los ofrecen al ser gitanos”, dijo.

“Están dispuestas a pagar un alquiler social y todos los gastos”, recalcó. Salazar agradeció la mediación del alcalde y este insistió en que es preciso favorecer el acceso a vivienda social para evitar que los pueblos pierdan población.

Este diario intentó sin éxito recabar la versión de la Sareb..

La Generalitat intenta sin éxito hacerse con estos pisos La Agència de l’Habitatge de Catalunya (AHC) enLleida lleva intentando sin éxito que se renueven los alquileres en el bloque desde finales de 2019, cuando se cortó la luz a los vecinos. Según Gras, incluso se ha planteado la adquisición para su parque de vivienda social aunque no ha habido avances. Lo atribuyen a que Sareb pone objeciones sobre el tiempo que deben estar los pisos vacíos. Insistió en que ya ha tenido varias reuniones sobre el tema y que incluso se plantean sanciones por no incentivar el alquiler.