El Meteocat renovará radares 'obsoletos' para alertar antes de grandes tormentas y riadas

El Servei Meteorològic de Catalunya (Meteocat) quiere alertar con mayor antelación y precisión sobre temporales como los que han asolado Lleida en los últimos años. Episodios de clima extremo como la Dana de octubre de 2019 y el Gloria de enero de 2020 han provocado riadas, aludes y graves daños en las comarcas leridanas. Para el director de este organismo de la Generalitat, Eliseu Vilaclara, mejorar las alertas requerirá renovar la red de radares. “Tenemos cuatro que han quedado bastante obsoletos”, dijo, y avanzó que “estamos intentando buscar financiación y preparando el proyecto”.

Vilaclara apuntó que “el punto extremo que tienen algunos episodios, que es lo que hace que acaben siendo una catástrofe, es lo que aún cuesta de determinar a no ser que sea a muy corto plazo” y añadió “muchas veces no da tiempo para avisar”. Aseguró que “cuanto más conozcamos la lluvia que cae, más capacidad tenemos de poder dar avisos de calidad, aunque sea con poco tiempo”.

“Los datos climáticos del país son los que sirven para hacer una buena ordenación territorial”

Recordó que desde hace un año cuentan con una nueva alerta meteorológica, la de tiempo violento. “Está basada en información del radar y de rayos” y “son avisos muy rápidos que hacemos llegar a Protección Civil”, dijo. Añadió que “acabamos alertando a nivel de comarcas y los fenómenos de pedrisco, precipitación muy intensa, ventadas o tornados acaban afectando a zonas concretas”. Por ello, “tenemos que ser capaces de concretar cada vez más qué zona se verá afectada”. Señaló que también “tenemos los avisos que hacemos siempre, con umbrales de intensidad y acumulación de lluvia”.

El Meteocat cumplió ayer 100 años de su fundación en 1921 y, en cuanto a las líneas de actuación para los próximos años, su director dijo que “tenemos que trabajar aún más en las proyecciones climáticas” porque “sabemos que hay un cambio climático pero tenemos que intentar cuantificarlo al máximo posible”. Esto es necesario, recalcó, porque los datos climáticos del país son los que sirven para “hacer una buena ordenación territorial, para saber dónde puedes construir y dónde no, qué puedes poner en cada sitio en función de las zonas inundables o para aprovechar mejor las energías renovables”.

Además, Vilaclara apuntó que es necesario “conseguir las competencias que nos faltan, poder hacer meteorología aeronáutica” o acceder a organismos internacionales.