Salud investiga dos muertos en Tàrrega y Cervera tras una dosis de Astrazeneca

El departamento de Salud investiga la muerte de un hombre en Tàrrega y otro en Cervera horas después de recibir la primera dosis de la vacuna contra la Covid-19 del laboratorio AstraZeneca. Fuentes de la conselleria corroboraron que estos dos casos son objeto de “estudio”, aunque advirtieron de que el proceso “no es rápido” e insistieron en que los beneficios de la vacunación superan los riesgos. Pese a que la Agencia Europea del Medicamento (EMA) ha relacionado esta vacuna con la aparición ocasional de trombos y el Gobierno español ha restringido su uso (ver desgloses), los casos con resultado de muerte son muy pocos.

El fallecido en Tàrrega, G. G. L., tenía 65 años, estaba prejubilado, hacía ejercicio con frecuencia y no se le conocían patologías previas. Murió el miércoles por la mañana, dos horas después de vacunarse en el Espai Mercat. Según fuentes de su entorno familiar, estaba en su casa conversando por teléfono con una de sus hijas cuando de pronto perdió el conocimiento. Alarmados, sus familiares acudieron a su domicilio, donde lo encontraron muerto. Dos equipos del Servei d’Emergències Mèdiques (SEM) acudieron al lugar e intentaron reanimarle sin éxito durante más de una hora y media.

En cuanto al vecino de Cervera, C. Z. M., tenía 63 años y falleció el pasado 25 de marzo, horas después de recibir la primera dosis de la vacuna de AstraZeneca. Según confirmaron fuentes cercanas, se había quejado de “fuertes dolores de cabeza” desde que le administraron la inyección. Según fuentes familiares, pasó una mala noche y sobre las siete de la mañana llamaron a los servicios de emergencia, pero estos no pudieron hacer nada para salvarle la vida.

Ambos casos están a la espera de autopsias para determinar las causas de las muertes. El sistema de farmacovigilancia del departamento de Salud está investigando ambos fallecimientos, aunque desde la conselleria puntualizaron que “por el momento no se puede hablar de una relación causa efecto con la vacuna y hay que conocer primero todas las causas de ambos fallecimientos”.

Unos pocos trombos tras millones de vacunaciones

La Agencia Europea del Medicamento confirmó el miércoles un vínculo de AstraZeneca con la aparición de trombos en personas que recibieron esta vacuna, pero valoró que sus beneficios siguen estando por encima del riesgo de efectos secundarios. El comité de seguridad de este orgamnismo cree que los coágulos de sangre “deben incluirse como efectos secundarios muy raro”.

Hasta la fecha se han notificado algo más de un centenar de trombos en Europa de personas vacunadas, de los que una veintena han resultado mortales. Se trata de un porcentaje ínfimo respecto los más de 25 millones de vacunaciones y es un número muy inferior al de decesos por la Covid-19.

Primero hasta los 55 años en España y ahora solo a partir de los 60

La vacuna de AstraZeneca ha pasado de ser la que se administraba en España a personas de hasta 55 años a administrarse solo a partir de los sesenta. La decisión del ministerio de Sanidad de limitar su uso al grupo de edad comprendido entre los 60 y los 65 años es una medida de “precaución” después de que la Agencia Europea del Medicamento la asociase a trombos. Tras entrar en vigor ayer mismo, el ministerio de Sanidad amplió por la tarde su uso hasta los 69 años. Las diferentes decisiones que ha adoptado el Gobierno español sobre el uso de esta vacuna han diferido en varias ocasiones respecto a los criterios de otros países de la Unión Europea.