Los municipios leridanos de la AP-2 se unen para denunciar la afectación por el fin de la concesión de autopistas
Constituirán una asociación e invitarán a los otros municipios catalanes
El peaje de la AP-2 a la altura de Lleida con la ciudad al fondo.
Los ayuntamientos de los dieciséis municipios leridanos por donde pasa la AP-2, en el Segrià y Les Garrigues, han decidido hacer un frente común para denunciar que la finalización de la concesión de la autopista a finales de agosto les supondrá dejar de ingresar en total 1,3 millones de euros en concepto del Impuesto de Bienes Inmuebles de Características Especiales (IBI-BICE). Plantean emprender medidas para paliar y resarcir las pérdidas económicas que esta situación generará en las arcas de respectivos consistorios.
Los ayuntamientos leridanos, que se han reunido telemáticamente este lunes, han acordado constituir una asociación a la cual invitarán a sumarse los otros municipios catalanes afectados por el fin de la concesión de la AP-2, el AP-7 y otras autopistas de peaje propiedad de la Generalitat.
La alcaldesa de Aitona y secretaria general de la Asociación Estatal de Municipios Afectados por Autopistas y Túneles de Peaje, Rosa Pujol, ha explicado que ante esta situación los consistorios leridanos por donde pasa la AP-2 han acordado ir a la una y constituir una asociación catalana a la cual invitarán a sumarse al resto de los municipios del país por donde discurre la AP-2, así como a aquellos afectados por el fin de la concesión del AP-7, en el tramo de Barcelona a la Jonquera, y de otras autopistas de peaje propiedad de la Generalitat. Son más de un centenar de ayuntamientos afectados, ha dicho Pujol.
