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Alud de críticas en Lleida a pagar por circular en las autovías y la AP-2 tras liberar el peaje
Una primera propuesta del Gobierno español apunta al cobro de un céntimo por kilómetro || El Ejecutivo asegura ahora que solo lo aplicará en 2024 si hay recuperación económica y abre la puerta a aplazarlo
Imagen reciente del peaje de la AP-2 en Lleida.
El proyecto del Gobierno español de establecer un sistema de pago a partir de 2024 por circular por las autovías y las autopistas que para entonces estén libres de peaje, como la AP-2, ha cosechado un alud de críticas en Lleida. El sector del transporte, la Cámara de Comercio y las plataformas que reclaman seguridad en la N-240 expresaron ayer objeciones a esta propuesta.
También ha recibido quejas de la Generalitat, partidaria del sistema europeo de viñeta, porque el Estado no la ha consensuado con los gobiernos autonómicos. Asociaciones de consumidores como la OCU y FACUA, y otras como el Real Automovil Club de España (RACE) se han sumado a la oposición a esta medida.
El presidente de la Cámara de Comercio de Lleida, Jaume Saltó, afirmó que “no ven bien” el pago por usar las vías de alta capacidad al considerar que encarece costes de transporte, si bien apuntó que esperan a conocer los detalles de la propuesta del Gobierno. Sílvia Llobet, secretaria general de la patronal del transporte Asotrans, consideró que su sector está ya muy gravado con impuestos y solo se mostró dispuesta a aceptar la propuesta del Gobierno si se aplica de forma equitativa a todos los vehículos y territorios.
El alcalde de Les Borges y presidente de la plataforma Prou Morts a la N-240, Enric Mir, apuntó que el fin de la concesión de la AP-2 el 1 de septiembre y el fin del actual peaje “no significa el fin de los pagos” y que el que ahora plantea el Estado “refuerza la reivindicación de mejorar la N-240”. Asimismo, la plataforma Rescap-2, que confiaba en el final del peaje para reducir el tráfico en la N-240 y ganar seguridad, ve “inadmisible” que la AP-2 vuelva a ser de pago 3 años después de concluir la concesión.
El futuro sistema de pago está por establecer, pero el Estado estudia cobrar un céntimo por kilómetro. La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, reconoció que apuntan a 2024 para aplicar los pagos, aunque puntualizó que no lo harán hasta “tener asentada la recuperación” económica, con lo que abrió la puerta a aplazarlos. La ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, añadió que “es razonable plantear que paguen también los 100.000 vehículos que entran cada día en el país, la mitad de ellos extranjeros”.
