LLEIDA Y COMARCAS
Los botellones de la canalización del Segre llegan al Turó de la Seu Vella
Una fiesta en las inmediaciones de la antigua catedral reunió el sábado a 300 jóvenes || La patronal del ocio nocturno pide abrir hasta las cuatro de la madrugada
El primer fin de semana entero sin estado de alarma y toque de queda se tradujo en concentraciones nocturnas multitudinarias de jóvenes en ciudades de todo el Estado. Lleida no fue una excepción y, además de repetirse en la canalización del Segre, la Seu Vella se convirtió el sábado en el punto de encuentro de 300 jóvenes para beber.
La Guardia Urbana se trasladó a este último emplazamiento tras recibir quejas por el fuerte ruido de la música. Durante dos horas desde la doce de la madrugada, diez patrullas controlaron la zona e identificaron a una quince de jóvenes.
A la salida del Turó de la Seu Vella también instalaron controles de alcoholemia en los que identificaron a cerca de un centenar de conductores. .
En otras ciudades como Barcelona, los Mossos y la Guardia Urbana desalojaron a más de 9.000 personas en botellones. El punto en el que se concentraron más jóvenes fueron las playas, especialmente en la de Sant Miquel, a la que acudieron alrededor de dos mil personas. Estas concentraciones derivaron en altercados en Pamplona, donde cuatro agentes de la Policía Municipal resultaron heridos el sábado por la noche cuando acudieron a varios botellones a los que fueron recibidos con lanzamientos de piedras, cristales y contenedores ardiendo.
La otra cara de la moneda del final del estado de alarma es la reactivación del sector turístico
Por todos los sucesos ocurridos en varios puntos de Catalunya, la Federació Catalana d’Associacions d’Activitats de Restauració i Musicals (Fecasarm) reclamó “una reacción urgente” de la Generalitat ante las aglomeraciones nocturnas en las que no se respetan las medidas de seguridad. Para ello, la patronal pidió ampliar el horario de la restauración hasta la 1.00 de la madrugada y abrir el ocio nocturno de forma progresiva “hasta las 4.00 o las 5.00”, lo que según ellos reducirá los botellones y fiestas ilegales.
La otra cara de la moneda fue que este fin de semana muchas empresas de actividades al aire libre pudieron retomar la actividad, como por ejemplo las empresas de rafting y barranquismo en las comarcas del Pirineo leridano.