El cierre de Mont-rebei lleva a que se anule el 20% de reservas turísticas

El cierre del desfiladero de Mont-rebei desde el pasado mes de noviembre está provocando la cancelación de un 20% de las reservas en actividades náuticas, de aventura y en alojamientos turísticos del Montsec. Los empresarios turísticos alertan que son diarias las anulaciones de actividades y “gente que llama para informarse y acaba renunciando cuando conoce que no puede caminar por el sendero natural”, explicaron algunos de los empresarios de la Vall d’Àger.

“Es una situación grave que afecta a todas las empresas que vivimos del congosto y organizamos actividades en el entorno”, explicó Enric Maestre, uno de los empresarios. Hasta una decena de alojamientos turísticos, empresas y servicios han tenido alguna cancelación desde Semana Santa, “especialmente los fines de semana”, aseguran.

A las puertas de la temporada alta ven peligrar sus negocios si no se actúa con celeridad en las obras para rehacer el camino, dañado por un desprendimiento de rocas el 12 de noviembre. “No entendemos el retraso cuando se trata de una actuación urgente y vital para la economía de la zona”, explicó Josep Maria Mercader, titular del Camping d’Àger.

Los empresarios denuncian un agravio en relación al desprendimiento registrado en la línea de tren de La Pobla (propiedad de FGC) el 12 marzo, que ya está arreglado y el tren circulando, “mientras aquí seguimos cerrados y esperando a que se actúe”, dijo. .

Por su parte, la alcaldesa de Àger, Mireia Burgués, confió que en breve se puedan licitar las obras para rehacer el tramo de camino hundido y abrir lo antes posible el desfiladero. “Entiendo la preocupación del sector turístico pero los trámites llevan su tiempo y hasta ahora no hemos podido agilizarlos”, dijo. Añadió que la previsión es que en pocos días se pueda adjudicar la actuación. El consistorio cuenta con fondos de la Diputación para afrontar estas obras.

Locales de la zona oscense, cerrados por falta de clientes

El cierre del congosto de Mont-rebei no solo afecta a la zona catalana del desfiladero, sino también a la aragonesa. Tanto es así que muchos de los bares y restaurantes de El Pont de Montanyana y Viacamp están cerrados al no tener clientes. “La mayoría viven de la gente que visita el congosto al estar situados en uno de los accesos más utilizados de Mont-rebei”, explicó el alcalde de Viacamp, Alfredo Pociello. Precisamente, una de las empresas que ofrece trayectos en barca por las aguas de Canelles debe recoger a sus clientes en Corcà (Àger), “porque aquí no hay servicios”, dijo. Confió que en verano esté reabierto el camino, “de lo contrario, tendremos un problema serio y será difícil gestionar la temporada”, dijo. Paralelamente, el consistorio de Viacamp está llevando a cabo la mejora del camino de acceso al desfiladero, que permanecerá cerrado hasta el próximo día 1 de junio.