Un vecino de La Seu lega un edificio para que el ayuntamiento habilite diez pisos sociales

El ayuntamiento de La Seu ha recibido un valioso legado. Se trata de un edificio en el centro de la ciudad. Su propietario, recientemente fallecido, cedió el usufructo de este inmueble inacabado al consistorio durante 99 años, y el gobierno local, en manos de Junts y ERC, prevé habilitar en él pisos sociales. Con ellos espera ofrecer vivienda de alquiler asequible a jóvenes, familias monoparentales y otros colectivos con dificultad para pagarla a precio de mercado.

El vecino fallecido, Joan Obiols Cordellana, era conocido en La Seu como Juanito de Cal Pensament y murió a una edad avanzada, cerca de cumplir los 90 años. Tras conocer su voluntad de ceder el edificio al municipio, el ayuntamiento ha iniciado los ttrámites para aceptar la herencia. El edificio, construido hace más de 20 años, consta de subterráneo, planta baja y tres plantas en el Pasaje de la Misión. La estructura está ya completada y solo queda por habilitar el interior.

Fuentes municipales explicaron que cada planta dispone de 280 metros cuadrados y calculan podrán construir una decena de viviendas. El vicealcalde, Francesc Viaplana (ERC), explicó que la voluntad del difunto fue que el inmueble se destinase a “finalidades culturales o sociales”. “El ayuntamiento es consciente de la problemática de vivienda que tiene la ciudad y este edificio ayudará a darle respuesta”, afirmó.

De hecho, el pleno aprobó a finales del año pasado una moción para impulsar medidas “urgentes” para paliar la falta de vivienda pública. La presentó el grupo de Compromís X La Seu y fue negociada conJunts, ERC y la CUP. El equipo de gobierno trabaja con la Agencia de l’Habitatge paraaumentar la oferta de pisos de alquiler a precio asequible y en los últimos años han gestionado de forma conjunta 38 viviendas en alquiler social. Considera que los altos precios de venta y alquiler de las viviendas hacen “imposible” acceder a ellas a precio de mercado a familias sin recursos.

Viaplana agradeció “profundamente y en nombre de todo el ayuntamiento” el gesto de Obiols, que calificó de “inaudito”. Una vez se formalice la cesión del inmueble al consistorio, La Seu d’Urgell celebrará un acto de reconocimiento a este vecino y expondrá públicamente el proyecto. La voluntad es poder tener listas las viviendas sociales el próximo año, en 2022.