Nova Tracjusa medirá dos veces al año la contaminación del aire
La puesta en marcha del proyecto de Nova Tracjusa, que prevé obtener gas de residuos urbanos y utilizarlo como combustible para secar purines en la actual planta de Juneda, supondrá medir dos veces al año la contaminación del aire en torno al complejo. La Generalitat lo exige a los promotores, la cooperativa GAP, en la declaración de impacto ambiental favorable al proyecto.
Este documento se publicó ayer, meses després del visto bueno de la ponència ambiental. Reclama un “plan de vigilància ambiental”, con mediciones de dioxinas y otras emisiones que se tendrán que presentar al servicio de vigilància y control del aire del Gobierno.
Un laboratorio acreditado prendrà muestras en el municipio de Puiggròs, al considerarlo el “punto de más impacto de las emisiones en zona habitada”. Habrá dos campañas de vigilància de un mes cada una, con 4 muestras semanales en verano y 4 más en invierno, todas en momentos “representativos” del funcionamiento de la planta.
També se realizará una primera medición antes del estreno del complejo, para utilizar los datos como refereencia. La declaración incluye una planta de separación de residuos, si bé el promotor recordó que está descartada al no formar parte de la planificación del Gobierno.