PLENO PROVINCIAL
Una moción para limitar las renovables divide los votos de Junts y PDeCAT en la Diputación
La propuesta de En Comú Podem se aprobó con el apoyo de ERC, PSC, UA y dos diputados del partido que lidera Carles Puigdemont || El resto del grupo postconvergente se abstuvo, al igual que Ciudadanos
Talarn, Latorre y Rufach, durante el pleno celebrado ayer.
Una moción que exige poner coto al alud de proyectos de energías renovables en Lleida dividió ayer por primera vez el voto de Junts y del PDeCAT en la Diputación. Los dos partidos integran el grupo de JxCat, socio en el gobierno que encabeza ERC.
El pleno provincial aprobó el texto de En Comú Podem (ECP) con 17 votos a favor de esta formación, UA, PSC, ERC y los diputados provinciales Rosa Maria Perelló y Eloi Bergós, ambos de Junts. En cambio, se abstuvieron los seis del PDeCAT: Jordi Latorre, Rosa Pujol, Antoni Navinès, Francesc Sabanés, Joan Gilart y Ramon Cònsola. También lo hizo la portavoz de Cs, María Burrel. Paco Cerdà, del grupo de JxCat, no participó en la votación. Se excusó para ir al médico.
La moción rechaza centrales solares y eólicas “a costa de destrozar el medio ambiente, el paisaje y el suelo agrario”. La portavoz de ECP, Elena Ferre, valoró que la proliferación de proyectos en manos de grandes empresas energéticas y fondos de inversión es fruto de la “desregulación” y pidió dar “protagonismo” al territorio para decidir y beneficiarse de la transición energética. Durante el debate, Cònsola anunció que JxCat se abstendría. El PDeCAT cree posible evitar impactos negativos de las renovables sin aplicar medidas que frenen su implantación. Poco después, Perelló pidió la palabra para puntualizar que los miembros de Junts votarían a favor.
Esta división provocó sorpresa entre los asistentes al pleno. El presidente, Joan Talarn, afirmó que “es la primera vez que esto sucede” y apuntó la posibilidad de regular turnos de intervención si miembros de un mismo grupo votan en diferentes sentido.
Ferre, por su parte, se declaró “atónita”. Tras la sesión, Junts publicó un comunicado que señala que su voto “pone de manifiesto la diferencia de planteamientos” respecto al PDeCAT y “marca un inicio en la diferenciación de los grupos, también en la política territorial”.
Sin embargo, los dos partidos aseguraron que no tienen intención de romper el actual grupo de JxCat en la Diputación. El vicepresidente primero, Jordi Latorre (PDeCAT), apuntó que su formación y Junts acordaron mantener los grupos en las administraciones locales y otras instituciones que se constituyeron antes de que se presentaran por separado a las elecciones autonómicas.
Solo el partido de Carles Puigdemont consiguió representación parlamentaria y forma parte del nuevo Govern con ERC.
Acuerdo unánime en contra de la “criminalización” de los agricultores El pleno aprobó por unanimidad una moción del PSC y UA en contra de la “criminalización” del sector agrícola leridano con el inicio de la campaña de la fruta y la llegada de temporeros. El texto subraya la diferencia entre trabajadores en explotaciones frutícolas y personas en busca de empleo, algunas de ellas sin techo, y recuerda que las que están en situación irregular no pueden ser contratadas. Asimismo, pide inspecciones como medio para castigar infracciones. El apoyo unánime a esta moción no estuvo exento de matices. Así, ECP insistió en reclamar regularizaciones a personas sin papeles que trabajen en la campaña de la fruta. ERC cuestionó la exigencia de inspecciones al considerar que “criminalizan” a los payeses. Por otra parte, el pleno aprobó un convenio que aportará 300.000 euros a la Paeria de Lleida para gastos derivados de la prevención de la Covid-19 durante la campaña de la fruta.
