Alumnos de la Seu d'Urgell, Puigcerdà y Andorra utilizan por primera vez un pabellón polideportivo para hacer la selectividad

Hasta 240 alumnos de Bachillerato de la Seu d'Urgell, Puigcerdà y Andorra han empezado este martes los exámenes de selectividad, que por primera vez se llevan a cabo en el pabellón polideportivo de la capital del Alt Urgell. Este año se ha buscado este espacio con el fin de garantizar las medidas de seguridad para minimizar los riesgos de contagio de la covid-19 y delante el elevado volumen de estudiantes que este curso hacen las pruebas de las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU).

La cifra ha crecido con respecto a años anteriores teniendo en cuenta que la mitad de los estudiantes vienen de centros educativos del Principado andorrano para presentarse a la fase específica, ya que la general la tienen convalidada con la Prueba Oficial de Bachillerato (POB) que hacen a su país.

El presidente del tribunal de las PAU de la Seu d'Urgell y profesor de la Universidad de Lleida (UdL), Julián Acebrón, ha explicado que el uso del pabellón polideportivo para hacer los exámenes los aporta unas "condiciones diferentes" con respecto a las ubicaciones anteriores, pero que, a la vez, es un espacio amplio y bien ventilado que garantiza la capacidad siguiendo las normas del protocolo de la covid-19.

En este sentido, cada alumno se tiene que sentar en la misma mesa en todas las pruebas y este lugar queda identificado en una etiqueta para, ante un caso positivo, saber quién estaba a su alrededor. A pesar de meter a los 240 alumnos en una única sala, se han marcado cuatro secciones diferentes y cada una de ellas tiene sus vigilantes. En total hay diez, que también hacen la función de correctores.

Mientras, la mitad de los estudiantes que hacen la selectividad en la capital del Alt Urgell vienen de Andorra para presentarse a las pruebas de la fase específica, con las cuales pueden subir nota. Otros 69 son del Instituto Joan Brudieu de la Seu d'Urgell y 51 más del Instituto Pere Borrell de Puigcerdà. En total se examinan 43 alumnos más que en julio del año pasado.

Con respecto a la elección de la lengua en que están escritos los enunciados, Acebrón ha explicado que en el momento de recoger las etiquetas se ha hecho "más énfasis" al explicarles, uno por uno, que tienen la opción de tenerlos en catalán, castellano o aranés. Además, ha dicho que en la sala se han colocado varios carteles que informan de esta posibilidad.

El presidente del tribunal de las PAU de la Seu d'Urgell ha detallado que cada año hay algún estudiante que lo pide y que no hay ningún tipo de incidente para hacerlo.

Varios alumnos han valorado positivamente poder hacer los exámenes en el pabellón polideportivo como el Roger Garcia, de la Seu d'Urgell, que ha explicado que cuando vio en una fotografía el montaje del espacio pensaba que sería más pequeño de lo que ha encontrado cuando ha entrado. Mientras, Natàlia Pérez, también de la capital del Alt Urgell, ha dicho que le ha gustado el recinto y que se ha sentido "muy tranquila".

En relación al examen, han coincidido en qué no difería demasiado del qué habían practicado en clase, como también ha asegurado Pol Trilles, estudiante de Bachillerato de Puigcerdà, que considera que "no era especialmente complicado". En este sentido, Ares Jordan, también de la capital ceretana, cree que han sido más "benevolentes" con el tema de la covid-19 y que espera que a todo el mundo "le habrá ido bien".