Los turistas llenan el Sobirà el fin de semana y bungalows completos hasta finales de agosto

Los hoteles del Pallars Sobirà cerraron ayer un fin de semana en el que han rozado el completo y han contado con entre el 90% y el 100% de sus plazas reservadas. Así lo aseguró el presidente de la Federación de Hostelería, Josep Castellarnau, que atribuyó, en parte, estos buenos datos a la celebración del festival Esbaiola’t en Esterri d’Àneu (ver página 26). De hecho, este certamen también llenó los bungalows y plazas de acampada de este municipio y de La Guingueta. La presidenta de Càmpings de Lleida, Marta Cortina, explicó que los bungalows de la demarcación ya han colgado el cartel de completo hasta finales de agosto.

Mientras, Castellarnau apuntó que los hoteles de otras zonas del Pirineo registraron una ocupación que osciló entre el 60% y el 70% y en el llano se situó en un 40%. Por su parte, las casas de turismo rural de las comarcas de montaña han tenido una ocupación de aproximadamente el 70% y las del llano, de entre un 50% y un 60%. El presidente de la Federación de Turismo Rural, Jaume Ramon, recordó que su sector se ha visto afectado de nuevo por el límite de 10 personas en las reuniones que ha decretado la Generalitat debido a la crisis sanitaria del coronavirus.

Las actividades acuáticas en el Noguera Pallaresa, uno de los principales reclamos turísticos del Pirineo

Asimismo, los deportes de aventura también han contado durante el fin de semana con un buen nivel de reservas y el presidente de la Associació d’Empreses d’Esports d’Aventura del Sobirà, Flòrido Dolcet, señaló que mantienen el optimismo para esta campaña de verano. Cabe recordar que el sector turístico de las comarcas de Lleida prevé igualar e incluso superar este año el récord de la campaña estival de 2019, antes de la pandemia. Además, Dolcet aseguró que las actividades acuáticas en el río Noguera Pallaresa “refuerzan su potencial” como uno de los principales reclamos turísticos del Sobirà.

El Solsonès sanciona a bañistas incívicos con multas de hasta 3.000 euros

El número de bañistas en pantanos y rieras del Solsonès se ha triplicado desde la pandemia. Esto ha supuesto también un incremento de conductas incívicas en zonas que, hasta ahora, han estado prácticamente vírgenes. Por ello, 8 municipios (Clariana de Cardener, Olius, Navès, Lladurs, Odèn, Castellar de la Ribera, Guixers y Sant Llorenç de Morunys) han decidido contratar un servicio de seguridad privada para multar a los bañistas incívicos con sanciones que van de los 100 a los 3.000 euros.

Aparcar mal, abandonar residuos, llevar el perro sin atar o poner la música demasiado alta son algunos ejemplos de conductas que a partir de ahora ya son sancionables.

El alcalde de Guixers, Jordi Selga, lamentó, en declaraciones a ACN, que los ayuntamientos (todos ellos pequeños y con poca capacidad económica) tengan que hacer frente a este gasto y reclamó a la Generalitat que cree la figura de vigilante rural.