Salud refuerza la vigilancia para detectar coronavirus en aguas residuales del Baix Segre

El Departamento de Salud ha intensificado, desde hace unas semanas, los controles para detectar presencia del coronavirus SARS CoV-2 en las aguas residuales de los municipios del Baix Segre que tienen más concentración de empresas hortofrutícolas.

Se trata de las estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR) de Aitona-Seròs, Alcarràs y Torres de Segre que, coincidiendo con el incremento de población de la campaña de recogida la fruta, se analizan semanalmente desde el mes de mayo.

Las muestras recogidas del agua permiten prever incrementos en la incidencia de la Covid entre la población y tomar medidas preventivas para cortar cadenas de transmisión. La medida se llevará a cabo hasta finales de agosto o principios de septiembre.

La monitorización de estas aguas permite a Salud observar si hay presencia del genoma del virus, ya que las personas contagiadas, tanto las sintomáticas como las asintomáticas, excretan el virus por medio del excremento.

El seguimiento de la evolución de los resultados determina si el nivel de genoma encontrado en una EDAR aumenta, se mantiene o disminuye respecto de la semana anterior.

Esta información ayuda a predecir el incremento de incidencia de la covid-19 en la zona o zonas analizadas, ya que el genoma puede aparecer a las aguas residuales antes de que se den los casos en la población. "Disponer de datos semanales que nos permiten conocer cómo circula el virus en las aguas residuales en la zona frutícola donde hay mayor concentración de personas es una herramienta de vigilancia útil para prever y adelantarnos a los posibles casos positivos que se manifestarán posteriormente", explica Mercè Bieto, subdirectora de Salud Pública en la Región Sanitaria de Lleida y en la Región Sanitaria del Alt Pirineu y Aran. Además, Bieto destaca que "la probabilidad de que el virus en el excremento sea infectivo es extremadamente baja, porque el paso por el estómago lo destruye".

Las depuradoras analizadas con más intensidad a raíz de la campaña de la fruta cubren los municipios de Alcarràs, Torres de Segre, Soses, Aitona y Seròs, con una población de unos 18.000 habitantes, que se multiplica durante los meses de verano. Salud destaca que, en las últimas semanas, la presencia del genoma del virus ha mostrado una tendencia al alza.

La Agencia de Salud Pública de Catalunya y la Agencia Catalana del Agua (ACA) impulsaron en julio del 2020 la creación y despliegue de la red catalana de vigilancia del material genético del virus SARS-CoV-2 en las aguas residuales muestreando en la entrada de EDAR de Catalunya.

El proyecto está coordinado por el Institut Català d'Investigació de l'Aigua (ICRA) y cuenta con la participación de tres laboratorios de referencia con respecto al análisis de virus en muestras ambientales y clínicas.

Además de las tres EDAR del Baix Segre, en la demarcación de Lleida también se analizan las de Balaguer, les Borges Blanques, Cervera, Fondarella, Lleida, Montferrer, el Pont de Suert, Solsona, Sort, Tàrrega, Tremp y Vielha e Mijaran. Se controla también la depuradora de Puigcerdà, en la Región Sanitaria del Alt Pirineu y Aran. En total, estas depuradoras dan servicio además de 255.000 personas.