Finaliza la reforma de 15 kilómetros de la autovía tras meses de obras y retenciones

Las imágenes de largas colas de vehículos parados o circulando lentamente a su paso por la variante de la A-2 en Lleida formarán parte del pasado desde hoy. El ministerio de Transportes finalizó ayer las obras de renovación de la calzada de la autovía en los 15 kilómetros que van desde la salida de Torrefarrera a la de Els Alamús, que incluyen la variante de Lleida y registran un tráfico medio diario de 40.000 vehículos, buena parte de los cuales, camiones. A última hora de ayer acabaron los trabajos de señalización de la calzada en los 6 kilómetros entre las salidas de la C-13 y Els Alamús y debían quedar abiertos los dos carriles en sentido Zaragoza, mientras que en la calzada sentido Barcelona uno de los carriles seguirá señalizado con conos hasta media mañana de hoy, previsiblemente, para permitir que la adjudicataria (Sorigué) retire el material.

El subdelegado del Gobierno en Lleida, José Crespín, visitó ayer las obras poco antes de concluir y remarcó que su finalización se ha avanzado (la previsión era que las del último tramo duraran cuatro semanas desde el 23 de agosto) gracias a la climatología favorable y el escaso tráfico de la segunda quincena de agosto. Recordó que para 2022 quedarán aún trabajos de los carriles de aceleración y las rotondas, así como la última capa de rodadura, que implicarán menos restricciones.

La renovación de la variante de Lleida, la primera gran reforma de este tramo desde que se estrenó, en 1996, comenzó el 1 de junio de 2020 y se ha desarrollado desde entonces por tramos y con restricciones de forma intermitente. La previsión inicial era que los trabajos duraran tres años y que los últimos 7 kilómetros se abordaran el próximo 2022, pero finalmente se pudo avanzar y se han completado ahora. Las restricciones a la circulación durante esta intervención han sido contínuas y han causado colas kilométricas de vehículos, especialmente en hora punta. Este colapso ha llevado a los conductores alternativas como la LL-11 o la antigua N-II para entrar o salir de Lleida entre semana. El tráfico se ha disparado también en estas carreteras.

La AP-2 cumple una semana sin peajes sin cifras sobre el tráfico

La AP-2 cumple una semana sin peajes y de momento aún no es posible conocer el incremento del volumen de tráfico que absorbe esta vía rápida ya gratuita.

Desde el ministerio de Transportes apuntaron que las estimaciones de aforo se llevaban a cabo a través de un sistema emplazado en los peajes y puesto que no están operativos “es difícil conseguir estos datos hasta que se implemente un nuevo sistema”, dijeron. De hecho, la empresa que se adjudique la explotación de la carretera para los próximos dos años (proceso actualmente en trámite) será la responsable tanto de desmantelar las actuales estructuras de los peajes como de instalar estaciones de aforo de vehículos como las que hay en diferentes carreteras de Lleida.

El pasado fin de semana coincidiendo con la operación retorno se registraron las primeras colas de vehículos en Montblanc para acceder a la AP-2 en sentido Lleida, en el enlace con la N-240.

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