AGUAS SEQUÍA
La falta de lluvias deja sin agua la cola de los pantanos
La cuenca del Segre está en situación de prealerta por sequía || Los embalses, por debajo de la media del último lustro
La escasez de lluvias durante el verano ha dejado los pantanos de Lleida con la mitad de las reservas o menos coincidiendo, además, con las últimas semanas de la campaña de regadío, uno de los grandes usos del agua de los embalses. En la mayoría de los casos, el nivel del agua es inferior al de la media de los últimos cinco años por las mismas fechas. Por ejemplo, el pantano de Oliana almacena 39 hectómetros y está al 47%, casi un 20% menos que la media; y el de Rialb cuenta actualmente con 159 hectómetros, está al 39%, con un 20% menos de reservas.
Esta situación ha dejado las colas de los pantanos al mínimo de agua y pone a la vista los lodos del lecho. En la cola del pantano de Oliana, por ejemplo, pueden verse las huellas de jabalíes que han cruzado el cauce seco. La ausencia de nieves durante el pasado invierno (que con el deshielo vierten en los ríos) y la escasez de lluvias en los últimos meses han contribuido a esta situación. Según datos de la Confederación Hidrográfica del Ebro, la cuenca del río Segre se encuentra en una situación de prealerta, mientras que el conjunto de la margen izquierda del Ebro sigue en sequí o en una situación próxima a la sequía.