Niega que falsificara facturas para financiar a la antigua CDC

El juzgado de Instrucción número 1 de Lleida tomó declaración ayer como investigado al empresario de Mollerussa Gonzalo Niubó por su supuesta relación con el caso Boreas, de supuestas adjudicaciones irregulares de obra pública en la Diputación de Lleida cuando era presidida por Joan Reñé. El investigado, gerente de Serboniu, negó que la empresa que dirigía incurriera en ningún tipo de irregularidad y que estuviera implicada en la supuesta rueda de facturas falsas que habrían permitido, entre otras cosas, la presunta financiación irregular de CDC, según explicaron fuentes judiciales. Gonzalo Niubó explicó que las empresas de su familia, como Enginyeria Inalba que tiene con su hermano Esteve, dedicaban parte de su actividad a la obra pública y que las adjudicaciones que habían obtenido de la diputación de Lleida estaban dentro de la legalidad.

En cambio, se aplazó la declaración, también como investigado, de Esteve Niubó porque su abogado solicitó un aplazamiento para estudiar más a fondo la causa. Está previsto que declare en unas semanas. Asimismo, acudieron ayer al juzgado como investigadas dos empleadas de estas firmas, que negaron cualquier trama.

Habrían justificado que hacían facturas adelantadas por trabajos para cuadrar asuntos contables. Mossos y Fiscalía sospechan que estas empresas del Pla d’Urgell habían actuado en connivencia con el empresario Diego Garzón Uribe, de 86 años, titular de la firma aragonesa Interiorismo y Reformas Profesionales, en la rueda de facturas falsas. Garzón confesó que había una trama pero después lo negó.

Las facturas se habrían hecho por trabajos inexistentes en el mantenimiento de depuradoras o en obras del Segarra-Garrigues..