“La campaña forestal se ha superado con nota; había un riesgo extremo”

La campaña forestal del verano terminó el pasado 15 de septiembre y se ha superado con nota.

“Nos tenemos que felicitar porque el riesgo forestal que había este verano era extremo, de los peores de las últimas décadas”, explica Jordi Solà, jefe de la Región de Emergencias Lleida de los Bomberos de la Generalitat, a este periódico. En las comarcas de Lleida se registraron medio centenar de fuegos entre el 15 de junio y el 15 septiembre que calcinaron unas 166 hectáreas.

Solà afirma que esta cifra “se ha situado por debajo de la media de los últimos 15 años”.

Los dos incendios más importantes fueron los que hubo el 23 de junio en la Noguera por un camión con una rueda pinchada, lo que causó 41 focos diferentes y ardieron 71 hectáreas, y el del 27 de junio en Alfarràs, causado por una colilla, que calcinó 87 hectáreas (55 en Catalunya y el resto, en Aragón). En este sentido, el jefe de los Bomberos en Lleida recuerda que “un 40% de los fuegos están causados por negligencias y un 20% son intencionados”.

También hace hincapié en medidas que se han tomado este verano como el cierre de macizos para evitar incendios.

Es el caso, por ejemplo, del entorno de La Baronia de Rialb. “Un incendio que se hubiera descontrolado en esa zona habría sido una catástrofe”.

En este sentido, los Bomberos, cuando se declara un fuego, hacen “ataques rápidos y contundentes para evitar que se puedan escapar o se solapen con otros”, describe Solà. En cuanto al otoño, las últimas lluvias suponen un alivio para los bosques.