El Pirineo cierra el puente del Pilar con una ocupación de un 90% y los ojos puestos en la temporada de esquí

La demarcación de Lleida cerrará el puente del Pilar con un resultado muy satisfactorio, principalmente en la zona del Pirineo y el Arán, donde la ocupación durante estos cuatro días se ha situado en torno al 90% por término medio y ha llegado a rozar en muchos establecimientos el pleno durante el fin de semana.

Unos porcentajes de ocupación que hanestado por encima de las previsiones iniciales antes del puente. El balance mejora en un 5% los datos del mismo puente pero el año pasado, cuando se cerró con un 85% de ocupación. Eso ha supuesto un mayor volumen de ingresos para el conjunto del sector que ha podido recuperar prácticamente todas las actividades de antes de la covid-19.

El Patronato de Turismo de la Diputació de Lleida calcula que la demarcación ha recibido durante estos cuatro días la visita de más de 30.000 turistas alojados en establecimientos de turismo reglado, los cuales han generado en torno a unas 85.000 pernoctaciones a partir de la noche del viernes 8 de octubre hasta el martes, al margen de las segundas residencias, que también han tenido bastante actividad.

El año pasado, algunas de las actividades que tienen lugar por estas fechas en la demarcación no se celebraron de manera presencial, como la Fira del Torró i la Xocolata a la Pedra d'Agramunt o el Festival d'Astronomia del Montsec, entre otros.

La vicepresidenta del Patronato, Rosa Pujol, ha destacado el hecho que la demarcación ha vuelto a ser una destinación bien valorada por el público de proximidad en este puente, tal como ya ha ido pasando durante toda la pandemia, con un comportamiento extraordinario durante las dos temporadas de verano y los puentes de Mercè y este de la festividad del Pilar.

Es por eso, que Pujol confía en que esta tónica se pueda "mantener" durante los próximos fines de semana de otoño mientras ya se tienen los ojos puestos en la temporada de esquí, que este año podría funcionar con normalidad y así se pueda recuperar la actividad de antes de la covid-19.

Los diferentes sectores de alojamiento turístico de la demarcación de Lleida, como los establecimientos de hostelería, turismo rural y campings en la modalidad de bungalows, cerrarán este puente del Pilar en la zona del Pirineo con una ocupación medio del 90% y en algunos casos se ha llegado a fregar el pleno durante el fin de semana.

Por su parte, el turismo rural, que ha podido abrir este puente sin límites de aforo, ha tenido reservas para los cuatro días con una ocupación en el conjunto de la demarcación del 90% y muchos establecimientos han puesto el cartel de cumplido.

El sector del camping cerrará el puente con una ocupación también del 90% con respecto a las plazas de bungalows, mientras que la acampada, a pesar de tener un nivel más bajo de ocupación, ha estado más animada que años anteriores por estas fechas.

También se han notado una buena afluencia de visitantes que han hecho el desplazamiento y el alojamiento en los campings en caravanas, una modalidad de turismo que tiene cada vez más usuarios.

Por su parte, el turismo activo, que pondrá el punto y final a la temporada de agua el próximo 15 de octubre, ha tenido un buen comportamiento por este puente del Pilar con una contratación de servicios de entre un 50 y el 60% de su capacidad.

El resto de actividades de turismo activo, como el senderismo, el ciclismo, la BTT y la hípica entre otros, continuarán con normalidad durante lo que queda de otoño.