Siguen buscando a la supuesta víctima de un asesinato en un narcoasalto en Les Borges

Diferentes unidades de los Mossos d'Esquadra siguen buscando este martes en las afueras de Les Borges Blanques el cadáver de la supuesta víctima de un asesinato en un narcoasalto que el sábado pasado denunciaron tres de los responsables de una plantación de marihuana en la comisaría. La investigación se realiza, con el apoyo de un dron, por acequias, campos y caminos de la zona. Los Mossos encontraron ayer el coche del supuesto muerto, según ha podido saber este diario.

Una de las sospechas es que al autor o los autores del crimen podrían haberlo lanzado al agua u ocultado para dificultar la investigación. Asimismo, todo apunta que el desaparecido es un joven de unos 20 años vecino de la provincia de Barcelona, cuya desaparición ya fue denunciada el fin de semana pasado por sus familiares. También se buscaron indicios en el vehículo y se recogieron huellas dactilares.

El coche fue encontrado en los alrededores de la Escuela Agraria de la capital de Les Garrigues. Los investigadores, como es habitual en estos casos, también han pedido autorización judicial para identificar los números de móvil que había en la zona cuando se habría producido el crimen. Caber recordar que los tres detenidos afirmaron que habían visto a la víctima, que hacía las funciones de vigilancia, muerto con una bolsa de plástico en la cabeza, tal como adelantó SEGRE el domingo.

Son tres hombres de entre 28 a 43 años de nacionalidad española que ayer quedaron libres con cargos después de pasar a disposición judicial. Se acogieron a su derecho a no declarar y se les imputa, de momento, un delito contra la salud pública. Los tres acudieron a comisaría acompañados por sus abogados porque iban a denunciar unos hechos extremamente graves. La policía catalana investiga este extraño caso desde el sábado por la tarde.

Ante la confesión de los tres individuos, agentes de la Unidad Territorial de Investigación (UTI) de Ponent fueron a la plantación pero, por sorpresa, no encontraron ningún cadáver, aunque sí indicios de criminalidad. Los detenidos afirmaron que tenían una plantación de marihuana en la capital de Les Garrigues, que habían encontrado al vigilante asesinado –con una bolsa de plástico en la cabeza– y les habían robado las plantas, pero que ellos no eran los autores del crimen. En cambio, ayer se negaron a declarar en sede judicial, lo cual todavía dificulta más la investigación.