Las obras del geriátrico de Masia Salat, a primeros de 2022 tras 5 años parado

Los promotores del proyecto para convertir el antiguo hotel Masia Salat de Les Borges en un geriátrico con un centenar de plazas de residencia para la tercera edad aseguran que las obras comenzarán el primer trimestre del próximo año después de casi 5 de trámites y esperas. El ayuntamiento de la capital de Les Garrigues aprobó a finales de septiembre el Plan Especial Urbanístico (PEU) del complejo tras desestimar las alegaciones de la Corporació Agroalimentaria Guissona (CAG), que tiene una gasolinera en la zona, al considerar que se han cumplido todas las condiciones exigidas tanto por el Gobierno central como por la Generalitat. La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) remitió el verano del año pasado un informe desfavorable a la Agència Catalana de l’Aigua (ACA) que paralizó cualquier actuación al estar en una zona inundable afectada por el torrente de La Femosa.

El ACA lo desencalló en enero tras comprobar que se habían adoptado todas las medidas correctoras. Los accesos a la N-240 no se tocan, por lo que los técnicos no tienen objeciones. Ahora, la Generalitat refrendará todos los informes de los diversos departamentos del Govern que han participado en la valoración del proyecto (Acción Climática, Turismo, Cultura, Carreteras y la ACA), para que la comisión de Urbanismo dé el beneplácito definitivo y el consistorio pueda conceder la licencia de obras.

Ramon Mallol, uno de los promotores del proyecto, indicó que Urbanismo se encargará de esta gestión. “Estamos convencidos de que ahora no habrá trabas ya que hemos cumplido todos las exigencias durante los últimos años”, dijo. Compraron el hotel por 1,3 millones y prevén invertir otros 3 en la remodelación de las instalaciones.

Además, crearán 50 empleos.