Bovera abre el único comedor social de Les Garrigues para mayores con 16 comensales

Bovera abrió ayer su comedor social para personas de la tercera edad en el Casal, el único en funcionamiento en la comarca de Les Garrigues, por el momento. Lo estrenaron 13 comensales que degustaron el menú “in situ” y otros tres que prefirieron llevárselo a casa, según explicó el alcalde, Òscar Acero. Por 5 euros, el precio establecido, el menú incluía crema de calabaza, lomo estofado y plátano, con agua o vino para beber.

El objetivo de la iniciativa es garantizar a los mayores una comida caliente al día a la vez que socializan y tienen un motivo para salir de casa, explicó Acero. El comedor permanecerá abierto de lunes a viernes de 13.00 a 14.00 horas, “porque durante el fin de semana pueden estar son sus familiares”, matizó. El consistorio cuenta con la colaboración de la familia que gestiona el Casal, que es la que prepara las comidas, y espera disponer de ayudas para poder abaratar los precios (ver SEGRE del sábado 27).

El ayuntamiento de Vinaixa también prevé ofrecer menús para jubilados a partir de mañana, 1 de diciembre, en el bar municipal. Así lo aseguró ayer el alcalde de la población, Josep Maria Tarragó. En la actualidad, el centro de servicios organiza sesiones de manualidades y otras actividades para el entretenimiento de los mayores.

No contaba con restaurante. Tarragó indicó que se han hecho reformas en el bar y han llegado a una acuerdo con los gestores para que ofrezcan menús sociales por 6 euros para que, como en Bovera, puedan comerlos en el establecimiento o llevárselos a casa. L’Albi fue el primero en abrir en Les Garrigues un centro de servicios para la tercera edad hace cuatro años con comedor aunque cerró a raíz de la Covid y, según la alcaldesa, Anna Feliu, no está previsto volver a abrirlo por ahora.

Entre las poblaciones con iniciativas similares está Anglesola, que fue pionera en abrir un centro de servicios con menús que en la actualidad no funciona ya que la cocina está cerrada por la pandemia. Los vecinos pueden encargar su menú en Lleure Quàlia, cooperativa que se encarga del comedor escolar. En Agramunt, la residencia municipal Mas Vell ofrece servicio de comedor a las personas que no son usuarias que pueden llevarse la comida a sus domicilios.

En Mollerussa, el Espai Social de la Fundació Catalunya La Pedrera lleva a cabo el programa “Dina en companyia”. Se inició el 2015 y ha llegado a tener una cuarentena de usuarios. En Golmés, el nuevo Centro Municipal de Servicios Sociales también ofrece desde octubre menús para la tercera edad.

Aitona también ha puesto en marcha esta prestación y en Tremp, en el Jussà, el Casal Cívico ofrece menús económicos por 5,70 euros. Los usuarios son principalmente gente mayor.

Mejorar el servicio en los centros de La Granadella y Maials

El director de Derechos Sociales en Lleida, Joan Segura, aseguró ayer que estas iniciativas son muy válidas cuando no hay grado de dependencia de las personas mayores.

Remarcó que el Govern no las subvenciona ya que no precisan de atención. Destacó el caso de los centros de Servei d’Atenció Integral a la Gent Gran en l’Àmbit Rural (SAIAR) de Maials y La Granadella para usuarios con un grado de dependencia leve que también ofrecen atención a mayores de podología, peluquería, psicología, fisioterapia y comedor, entre otros. Segura remarcó que la Generalitat proyecta cambiar su funcionamiento y regulación para mejorar el servicio.

Asimismo, señaló que todas las iniciativas municipales son “bienvenidas” si sirven para reactivar a las personas mayores que se pueden valer por ellas mismas. Incidió en que incentivar a este colectivo es muy valioso y que cada vez más ayuntamientos optan por esta medida.