Nuevos centros de servicios para evitar la despoblación en los pueblos rurales

Dotar a los pueblos del mayor número posible de servicios para frenar la despoblación es el objetivo de muchos de los pequeños municipios de la Noguera, con grandes dificultades para atraer y fijar habitantes jóvenes. Es el caso de Les Avellanes i Santa Linya y de La Sentiu de Sió. Este último ha iniciado la construcción de un centro de servicios en la localidad.

El objetivo es centralizar en este equipamiento público distintos servicios, no solo para los mayores, sino también abierto a toda la ciudadanía porque prevé concentrar el casal de jubilados, una peluquería, un gimnasio, una lavandería y un espacio para entidades locales, talleres y cursos, entre otros. El proyecto contempla una inversión de 380.000 euros, financiados en el 95% por las ayudas del Plan de Obras y Servicios (Puosc) de la Generalitat y con fondos propios. El alcalde, Josep Torres, apuntó que el objetivo será mancomunar estos servicios con otros pueblos de la comarca para asegurar su viabilidad.

La previsión es que en verano estén finalizadas las obras. Por su parte, el ayuntamiento de Les Avellanes i Santa Linya ha comprado al obispado de Urgell una finca de 14.000 metros cuadrados en el casco urbano. Allí es donde el consistorio ha proyectado la construcción de otro centro de servicios para los vecinos del municipio, compuesto también por los pueblos de Tartareu, Vilanova de la Sal.

Con este equipamiento se evitará que la población tenga que desplazarse a otros municipios más grandes como Balaguer. La alcaldesa de Les Avellanes i Santa Linya, Lídia Ber, explicó que este centro nace con el objetivo de frenar la despoblación de este municipio rural. El consistorio ha pagado por la parcela 15.000 euros, una cantidad que ha sido financiada con una ayuda de la Diputación.