Aran recupera la normalidad y al fin reabre la Bonaigua

Los ayuntamientos de Les y Bossòst abordaron ayer la limpieza y reparación de calles y servicios, principalmente el alcantarillado, tras el desbordamiento de una decena de barrancos y torrentes afluentes del Garona que inundaron la N-230, donde ya no fue preciso dar paso alternativo (ver SEGRE de ayer). El caudal del río, que se desbordó en Francia, se redujo a los 41,6 metros cúbicos por segundo por la mañana (llegó a llevar 100 el lunes), aunque estas son cifras más propias de primavera. Las lluvias y el deshielo han afectado a otros barrancos de montaña del Parc Natural de l’Alt Pirineu i Aran, también a rebosar (ver desglose).

En Les aún no se puede actuar para reparar el depósito de agua de boca ya que es imposible acceder porque todavía baja mucha agua por el barranco de Sant Antoni. El puerto de la Bonaigua y el acceso a Beret quedaron abiertos después de tres días cerrados, aunque por la C-28 era preciso el uso de cadenas a última hora de ayer. Los técnicos del Centre d’Allaus de Aran trabajaron durante toda la mañana haciendo voladuras para provocar aludes y asegurar la zona donde el riesgo de avalanchas pasó de 4 sobre 5 a tres, es decir, moderado.La llegada de un anticiclón volvió a dejar las temperaturas bajo cero en cotas altas donde también se registraron nevadas. Las mínimas llegaron a los 7 bajo cero en Baqueira y a los 2 negativos en La Seu.

Los caudales se multiplican hasta por cinco tras las precipitaciones

Las precipitaciones del fin de semana y el lunes en cotas altas, en algunos casos por encima de los 2.000 metros, provocaron el deshielo de la nieve, lo que ha generado que el caudal de los barrancos del Pirineo se multiplique y algunos que incluso estaban secos desde hace años se desbordaran. El cambio climático es la causa de que llueva en cotas tan altas, según los expertos. Ha provocado que los ríos pirenaicos lleven caudales propios de la primavera, como el Noguera Pallaresa que ayer en Collegats llevaba 71,5 metros cúbicos por segundo. La media del caudal en este punto es de 15 metros cúbicos por segundo, por lo que se ha multiplicado casi por cinco.