La Universitat de Lleida ofrecerá prácticas en pueblos en un programa estatal de 'erasmus rural' con becas de 1.000 euros para alojamiento

La secretaría general para el Reto Demográfico firmará a partir de la semana que viene convenios con al menos 36 universidades, entre ellas, la de Lleida (UdL), para becar a estudiantes con 1.000 euros al mes en concepto de gastos y alojamiento para que cursen sus estudios de final de grado o de máster en el mundo rural. El programa tiene un presupuesto de 1,7 millones de euros por ahora y beneficiará a entre 200 y 250 alumnos en todo el Estado, que vivirán entre 3 y 5 meses en el entorno rural (municipios de menos de 5.000 habitantes).

El secretario general para el Reto Demográfico, el aranés Paco Boya, destacó que “nos interesa que haya la máxima movilidad” entre alumnos. El programa contempla que los estudiantes se desplacen a otras comunidades autónomas para llevar a cabo las estancias. Las prácticas se efectuarán previsiblemente en “pequeñas empresas, cooperativas o en actividades agroalimentarias”, señaló Boya, aunque “no descartamos prácticas vinculadas a antropología o sociología que puedan contribuir a estudios demográficos en torno a la despoblación”, señaló.

La secretaría para el Reto Demográfico prevé iniciar la convocatoria del programa a principios de febrero y los alumnos beneficiarios son los estudiantes que estén efectuando el trabajo de final de grado o los de máster, de modo que “sufragamos que cursen la fase final de sus estudios en los entornos rurales”.

La Universitat de Lleida, pendiente aún del convenio

La Universitat de Lleida está pendiente de recibir el texto del convenio para poner en marcha el Campus Rural, que deberá aprobarse previamente en una junta de gobierno. Fuentes de la universidad señalaron que el objetivo era ofrecer el programa este curso, si bien los trámites y la difusión del proyecto requerirán un plazo de tiempo por determinar que puede cambiar el calendario.

Zaragoza, primera universidad en becar estancias en el campo

La Universidad de Zaragoza cerró el año pasado la cuarta edición del programa Erasmus Rural, en el que ha sido pionera, con 49 estudiantes becados y con estancias en más de una treintena de municipios de la provincia. El programa se lleva a cabo en colaboración con la diputación de Zaragoza y lo impulsó la Cátedra sobre Despoblación y Creatividad a través de los proyectos Desafío y Arraigo. Dentro del programa Desafío se llevaron a cabo prácticas en las empresas Piensos Costa, Granja San Miguel y Escabechados Castejón de Valdejasa; la fundación Pueblo Viejo de Belchite; o la residencia de mayores de Romanos, además de ayuntamientos y un centro de salud. A través del programa Arraigo, las prácticas se desarrollaron en la empresa frutícola SAT Manubles de Moros y el grupo de acción local Adefo Cinco Villas, además de en corporaciones locales.

“El objetivo es atraer talento y que el entorno rural sea una vía”

El objetivo del programa Campus Rural es “vincular a los jóvenes con el mundo rural. Que aporten conocimiento académico y que las zonas rurales recuperen talento”, señala el secretario general para el Reto Demográfico, Paco Boya. “Nos interesa que tengan una experiencia académica y también afectiva, que conozcan el entorno rural y que se planteen que puede ser una vía” para el desarrollo de sus carreras. “Nos interesa que haya la mayor movilidad posible (de los alumnos) con dos objetivos: que conozcan el mundo rural y que si les surge una oportunidad profesional en este sector puedan aceptarla porque les es familiar”.Boya destacó el elevado grado de aceptación entre alumnos y universidades del programa Campus Rural y avanzó que la semana que viene comienzan a firmar los convenios con los centros. El acuerdo se ha negociado con la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE).