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Cincuenta familias ceden el local social a Ribera d'Ondara
Tras casi 4 años de negociaciones, el ayuntamiento lo asume para rehabilitarlo || Contempla una inversión de 200.000 euros
El local social de L’Amistat, ahora en manos del ayuntamiento.
Los socios del local social de L’Amistat de Ribera d’Ondara, un total de 56 familias de los núcleos poblacionales de Sant Antolí, Els Hostalets, Pomar y Briançó, han cedido la sede de este local por un plazo de 25 años al ayuntamiento para que invierta en la recuperación del inmueble y lo dinamice culturalmente. Se trata de un edificio situado en la calle Raval a pie de carretera en unos terrenos de 800 metros cuadrados y que cuenta con una sala de actos con capacidad para unas 200 personas, un bar de capacidad similar y otros edificios y patios anexos que se utilizan como almacén y zona de parquing respectivamente. La entidad votó por mayoría absoluta ceder las instalaciones ya que ni tiene capacidad para mantenerlas ni tampoco para impulsar su actividad.
El acto oficial se llevó a cabo el pasado viernes en una sesión plenaria en la que se aprobó el convenio firmado por el alcalde, Francesc Sabanés, y el presidente de la entidad, Ton Marina.Se trata de un local financiado por los mismos socios hace más de medio siglo que tiene un gran potencial tanto por su capacidad como por su ubicación en el centro de este municipio, que tiene además 14 núcleos agregados, y que ya es habitualmente el punto de encuentro y reunión de los vecinos y también de celebración de todo tipo de actos culturales y lúdicos tanto de Ribera d’Ondara como del municipio vecino de Talavera. Según explicó el propio alcalde, el ayuntamiento proyecta una inversión por fases de unos 200.000 euros en rehabilitar el tejado y los cierres y adecentar las zonas de su interior que han quedado obsoletas como los lavabos o la calefacción, además de instalar sistemas de suministro de servicios a través de energías renovables. Según el alcalde, el otro gran reto del consistorio será también la dinamización cultural y lúdica del inmueble.
El consistorio también se ocupará del bar y su arrendamiento. En la actualidad está arrendado por un plazo de 10 años. Las negociaciones para la cesión del complejo se remontan a 2018.
