TURISMO FLUVIAL
Resort para la pesca en Almatret
Almatret es el único municipio de Lleida a orillas del Ebro. Precisamente por eso, un promotor checo se fijó en este enclave, donde habilita un resort dedicado a pescadores atraídos, principalmente, por la posibilidad de capturar un enorme siluro. Responsables de las obras indicaron que el complejo estará listo en mayo tras superar innumerables trabas administrativas para conseguir los permisos medioambientales y urbanísticos (ver claves).
Ya tiene reservas de numerosos aficionados a la pesca, de países como Chequia, Eslovaquia, Polonia, Alemania, Estados Unidos, Canadá y Australia. El complejo contará con ocho bungalows, de los que este año se abrirán siete, además de áreas de acampada y una para siete autocaravanas. Tendrá un embarcadero con lanchas de alquiler para adentrase en el río a pescar y un bar restaurante.
Tendrá capacidad para una treintena de personas. Estará equipado para atender “a todo tipo de clientes, desde los más exigentes con requieren todos los servicios turísticos, hasta los que solo quieren venir y tomarse una cerveza pescando”, según responsables del complejo. Los precios, afirman, serán asequibles.Las obras preliminares comenzaron hace un año, pero las restricciones por la pandemia de la Covid y los requerimientos medioambientales al estar a orillas del Ebro y, por lo tanto, en zona inundable, han ralentizado los trabajos.
Se han ido adelantando los equipamientos básicos que se han podido ejecutar, como la red de agua, de saneamiento y eléctrica. También se han restaurado algunos bungalows, construidos por anteriores promotores que acabaron por abandonar el proyecto. Ya se han tomado medidas ante posibles avenidas, como la apertura de un canal que devuelva el agua al cauce del río y la construcción de una depuradora para las aguas residuales.Ahora que el futuro resort para la pesca tiene el beneplácito de la Confederación Hidrográfica del Ebro CHE) y de la Agència Catalana de l’Aigua (ACA), el promotor podrá agilizar los trabajos pendientes para que este espacio deportivo y residencial está finalizado en tres meses.
La zona cuenta con un plan urbanístico específico que regula la construcción en y con el respaldo del ayuntamiento de Almatret, que considera este complejo como un posible revulsivo turístico.