COMARCAS
Guissona se prepara para recibir mañana más de sesenta refugiados
Llegarán en avión desde Varsovia y se sumarán a los 105 que ya están en el municipio || Dos niños ucranianos en la escuela de La Portella y La Seu recibe a una familia
Niños refugiados ayer en la biblioteca de Guissona.
Guissona, que ayer ya acogía a 105 refugiados de Ucrania, se prepara para recibir mañana entre 60 y 75 más. Llegarán en un avión fletado por la Fundació Josep Santacreu, que saldrá de Varsovia con 250 ucranianos y aterrizará en Madrid y Barcelona. Parte del pasaje irá en autocar hasta la Segarra.
Según Ignasi Ribera, responsable de organizar la acogida, hasta ahora han llegado principalmente familiares de vecinos ucranianos del municipio. Han sido ellos mismos los que han viajado hasta la frontera para recoger a sus allegados, y ahora tratan de coordinarse para llevar a cabo estos viajes. El alcalde, Jaume Ars, explicó que la población dispone de más de un centenar de voluntarios que trabajan en la atención a los recién llegados.
“Además contamos con toda la comunidad de Ucrania, que se han ofrecido de forma masiva como voluntarios”, dijo Ars. El municipio puso en marcha ayer actividades en la biblioteca para los más pequeños, a la espera de saber si podría escolarizarlos. Precisamente por este motivo, el ayuntamiento mantuvo ayer una reunión con responsables de los servicios territoriales de Educación en Lleida.
Estos informaron al consistorio de que los 41 refugiados menores de edad podrán matricularse en los tres centros educativos de la localidad. Ars apuntó que el el CAP ofrecerá un servicio de atención psicológica y que el ritmo de escolarización lo decidirán los mismos padres y los colegios. Sin embargo, los tres centros de Guissona llevan años saturados a causa del crecimiento de la población.En otro orden, Tàrrega ha empadronado a 43 refugiados, aunque la alcaldesa, Alba Pijuan, afirmó que la ciudad acoge ahora muchos más.
De estos, 13 están en edad escolar. Asimismo, dos niños desplazados por la guerra empezaron ayer las clases en la escuela de La Portella. Mientras, a La Seu d’Urgell han llegado ya los primeros ucranianos huidos de la invasión rusa.
Se trata de una mujer y sus tres hijos, que tienen familia en la capital del Alt Urgell. Fuentes municipales explicaron que ya los han escolarizado.
