El alcalde de Guisona alerta que están llegando al límite de su capacidad de acogida
El alcalde de Guissona, Jaume Ars, explicó que, con 143 personas acogidas, están llegando al límite de su capacidad para atender a refugiados. De hecho, han sido dos semanas en las que tanto el consistorio como la población se han volcado en la atención humanitaria buscando alojamiento y organizando iniciativas para la atención psicológica, la educación, el ocio y la cultura. Al proyecto se han sumado masivamente los vecinos y entidades locales y también las empresas, en especial bonÀrea.
El reto de Guissona es notable (uno de cada siete vecinos es ucraniano) pero no único. Así, todas las poblaciones leridanas se han volcado de forma unánime. De hecho, lo demuestran las ofertas de viviendas de Biosca y Ossó de Sió, pero también La Sentiu o Ivorra, todos ellos coordinados desde Guissona.
Además, la semana pasada Guissona envió, con aportaciones de toda Lleida, un primer convoy de ayuda humanitaria de 12,5 toneladas entre productos sanitarios, ropa de abrigo y comida. Ars comentó ayer que el degoteo de personas refugiadas continuará durante las próximas semanas a un ritmo similar al actual, entorno a unas 10 personas diarias.