SOLIDARIDAD CON UCRANIA
Una ucraniana que logró huir de la guerra fallece en una gasolinera de Tàrrega
Una refugiada de 64 años se desplomó y murió mientras viajaba a Madrid || Primeros desplazados por la guerra en la capital del Urgell piden la protección de la UE
Refugiados empadronados en Tàrrega, a punto de partir para Lleida a solicitar la protección de la UE.
Logró huir de la guerra en Ucrania, pero falleció lejos de su hogar en una gasolinera en Tàrrega. Una refugiada ucraniana de 64 años, M. V., murió la madrugada del miércoles tras detenerse la furgoneta en la que viajaba en la estación de servicio. Una empleada alertó a las cuatro de la mañana de que la mujer se había desplomado al salir del vehículo, por causas que aún se desconocen. Hasta allí se desplazaron dos ambulancias y tres patrullas de los Mossos d’Esquadra, que intentaron reanimarla sin éxito con un desfibrilador. La refugiada, originaria de Kiev, viajaba a Madrid con su nieta, menor de edad, en una furgoneta domiciliada en Murcia.
Conducía el vehículo un hombre que llevaba consigo a cuatro menores a su cargo. Los Mossos llevaron a la nieta de la fallecida a la comisaría para iniciar las gestiones con el servicio de protección de menores.Por otra parte, los primeros 24 refugiados ucranianos empadronados en Tàrrega viajaron ayer en autobús a Lleida a tramitar la solicitud de protección temporal de la UE, que les permitirá desplazarse sin restricciones, trabajar, escolarizar a sus hijos y acogerse a prestaciones sociales.
El ayuntamiento fletó el bus para facilitar el traslado del grupo, acompañado de tres voluntarias lingüísticas y del jefe de la Policía Local. Desde el inicio de la guerra, en Tàrrega se han empadronado 123 refugiados ucranianos, de los que 58 son menores (46 en edad escolar). El lunes empezaron clases los primeros 19 refugiados y en próximos días se sumarán más.
Material para transfusiones de sangre a heridos
Material para facilitar transfusiones de sangre a heridos partirá de Guissona a Ucrania para colaborar con la asistencia médica a los afectados por la guerra. El grupo bonÀrea ha adquirido 1.100 bolsas específicas para esta finalidad y las entregó ayer a la comunidad ucraniana de Guissona, que se encargará de transportarlas. El director de recursos humanos de la empresa, Antonio Condal, explicó que la donación se hizo siguiendo indicaciones de la comunidad ucraniana sobre las necesidades que deben cubrirse. Hace unas semanas también se entregaron cinco palés de alimentos, material sanitario y eléctrico, como generadores, linternas y pilas. En Guissona viven 1.064 ucranianos.
