SERVICIOS BÁSICOS
Obras para evitar agua turbia y con arsénico en Naut Aran
Dos actuaciones con un presupuesto de más de 200.000 euros
El auntamiento de Naut Aran proyecta obras para evitar la presencia de arsénico y turbidez en el suministro de agua potable. Ha elaborado dos proyectos con esta finalidad y ya ha sacado a concurso las obras. Tienen un presupuesto total de 201.000 euros (243.000 con IVA) y plazos de ejecución de entre dos y cuatro meses.
El consistorio espera adjudicar estos trabajos a partir del próximo mes de mayo. El proyecto que supondrá una mayor inversión (de 132.352 euros, 160.146 con IVA), prevé dotar a los pueblos de Tredós, Salardú, Unha y Gessa de un suministro alternativo a la actual captación de la Font d’Alguaire. Según el proyecto, esta fuente “presenta un alto contenido en arsénico”.
Un exceso de esta sustancia tóxica en el caudal impidió beber el agua del grifo algunos días en 2017. No fue una concentración alarmante, pero estaba por encima del umbral recomendado por la Organización Mundial de la Salud. La presencia de arsénico en el agua obligó a instalar filtros en los depósitos de estos pueblos, que requieren una vigilancia diaria.
El consistorio plantea ahora interconectar la tubería que abastece a estas poblaciones con la del depósito de la cota 1.600, que suministra a la urbanización de Ruda y al núcleo de Baqueira. Esta obra permitirá mezclar el agua de la Font d’Alguaire con la del depósito de la cota 1.600 y rebajar la concentración de arsénico. También dará un suministro alternativo a Tredòs, Salardú, Unha y Gessa durante las operaciones de mantenimiento de los filtros.
En cuanto al segundo proyecto, con un presupuesto de 68.607 euros (83.015 euros con IVA), tiene como finalidad evitar la turbidez del agua en la captación del río Malo, que abastece a Ruda y Baqueira a través del depósito de la cota 1.600. El proyecto constata que, en episodios de tormentas, material arrastrado por las lluvias provoca que el caudal “no sea apto para el consumo humano”. Para evitarlo se cierra la entrada de agua al depósito de forma manual cuando hay previsión de fuertes lluvias, aunque esta solución tiene inconvenientes: no siempre es posible cerrar a tiempo para evitar que entre caudal turbio.
Además, cuando se cierra, el suministro depende de una captación alternativa en la Font d’Alguaire, con alta concentración de arsénico. El consistorio prevé instalar equipos automáticos que midan de forma continua la turbidez del agua del río. Asimismo, una válvula motorizada en el depósito impedirá la entrada de agua cuando esté demasiado turbia y la reabrirá cuando sea apta para el consumo.