Pillado un furtivo que quería cazar jabalíes y corzos en Les Garrigues
El hombre, inhabilitado durante dos años para la caza, utilizaba sirgas ilegales
Sirga en forma de lazo camuflada en el bosque.
Los Agentes Rurales han pillado y denunciado a un hombre que colocaba sirgas metálicas a modo de lazo para capturar jabalíes y corzos dentro de un Área Privada de caza en el término municipal de Cervià de les Garrigues. Estas trampas masivas son ilegales porque no seleccionan las capturas y los animales pueden quedar atrapados y tardar horas o días en morir, explican los rurales. La persona denunciada tiene antecedentes por furtivismo en la caza en la misma zona y ya había sido juzgada penalmente en Lleida e inhabilitada durante dos años para la caza, un periodo de tiempo que finalizó el mes de noviembre del año pasado.
La actuación, llevada a cabo por agentes rurales del Área Básica de Les Garrigues y miembros del Grupo Especial de Venenos y Antifurtivismo (GEVA), ha supuesto el comiso de nueve lazos grandes para ungulados, dos lazos para mamíferos más pequeños y tres trampas tipo cepo o ballesta.
El uso de este tipo de trampas no selectivas está tipificado en el Código Penal como un delito contra el medio ambiente y puede comportar penas de hasta 2 años de prisión para el furtivo, así como la suspensión de las actividades dentro del área de caza afectada. Una vez finaliza la temporada de caza, los Agentes Rurales del GEVA intensifican la vigilancia sobre prácticas ilegales de caza porque pueden causar daños a especies en peligro de extinción como el lobo o el oso.
Colaboración ciudadana
La detección de este tipo de trampas es una tarea complicada porque los cazadores furtivos las utilizan en lugares recónditos. Por esta razón el cuerpo de Agentes Rurales pide la colaboración ciudadana, especialmente de las personas que hacen excursiones o que van a hacer observaciones de naturaleza por lugares poco concurridos. Si se encuentra una trampa de estas características piden que se llame al 93 561 70 00.
