ARQUEOLOGÍA HALLAZGO
El antiguo cementerio de Guissona aflora al excavar el parque romano
Han retirado más de una veintena de cadáveres de entre los siglos XVIII y XIX
Un equipo de arqueólogos lleva a cabo esta semana una prospección arqueológica en el parque romano de Guissona, junto a la antigua carretera de Ponts, donde han aflorado hasta ahora 25 esqueletos del antiguo cementerio de la localidad. Según el arqueólogo Josep Ros, “si bien el antiguo cementerio ya estaba documentado, no esperabámos localizar una cantidad tan importante de restos humanos”. Son sepulturas que se remontarían al siglo XVIII y XIX, hasta que se construyó el nuevo cementerio de Guissona en 1881.
Con anterioridad al siglo XVIII, estaba ubicado en el entorno de la parroquia de Santa Maria desde la época paleocristiana. Se trata de una rasa de unos 25 metros de longitud y unos 7 metros de ancho en el actual parking del parque. En el futuro será donde se situará el edificio del Museu de Guissona, que tendrá un almacén para guardar los hallazgos.
Es uno de los diversos sondeos que se llevarán a cabo en esta zona, en la parte exterior de las murallas romanas. Según Ros, se trata de constatar si junto al cementerio hay también restos de época romana.Según Ros, fue el obispo de Urgell Josep Boltas, originario de Gra, quien pidió a la población contruir el nuevo cementerio en el último cuarto del siglo XVIII, coincidiendo con la construcción de la actual colegiata de Guissona. Se hizo bajo una clara influencia del edificio de la Universidad de Cervera y su interior imita al paraninfo universitario.
En la zona excavada se han localizado diversos cráneos agrupados en unos 10 metros cuadrados. Ancianos de la localidad afirman que, hace muchos años, los niños los habían usado como pelotas de fútbol. Los trabajos se enmarcan en las prospecciones previas para la redacción del proyecto del Museu de Guissona.
Tendrá una superficie de 1.200 metros cuadrados, de los que 700 se destinarán a la construcción de la nueva sede. La redacción del proyecto está subvencionada por la Generalitat por un importe de 107.358 euros.