Un plaguicida natural erradicará peces foráneos de lagos protegidos del Pirineo

Un plaguicida natural denominado rotenona se empleará por primera vez a partir del próximo año para erradicar peces foráneos de tres lagos de espacios protegidos del Pirineo leridano, uno en el Parc Nacional d'Aigüestortes y dos en el Parc Natural de l'Alt Pirineu. Las pruebas con esta sustancia se enmarcan en un proyecto Life financiado por la UE.

Lagos del Parc Nacional d’Aigüestortes y del Parc Natural de l’Alt Pirineu se someterán a un procedimiento hasta ahora inédito en Lleida para eliminar peces de especies invasoras. Un plaguicida natural denominado rotenona se verterá en sus aguas para erradicarlos a partir del próximo año.

Así lo prevé un nuevo proyecto Life financiado por la UE, coordinado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y con la participación de la Generalitat y del Conselh d’Aran. El proyecto, denominado Life Resque Alpyr, prevé aplicar este plaguicida de origen vegetal en 2023 en el Lac de Manhèra, en el área periférica de Aigüestortes en Naut Aran. En 2024 está previsto hacerlo en los dos lagos de los Tres Estanys, en el Parc de l’Alt Pirineu.

El uso de esta sustancia para eliminar peces invasores está consolidado en países como Estados Unidos y Noruega, pero tiene pocos precedentes en España y menos aún en Catalunya, donde solo se ha empleado una vez en el Parc Natural del Delta de l’Ebre.La documentación del proyecto describe la rotenona como el plaguicida “más seguro con diferencia” para la eliminación de peces “porque su toxicidad para ellos es mucho mayor que para otra fauna y se degrada rápidamente en la naturaleza”. Su uso irá precedido de estudios para verificar que no hay fauna autóctona que pueda resultar dañada y, si es preciso, de rescates de ejemplares para devolverlos después a su hábitat. Se limitará a “una acción experimental”, ya que esta sustancia “aún requiere un enfoque conservador, principalmente por la posible oposición del público”.Cada tratamiento durará alrededor de una semana, implicará al menos a 12 personas e irá seguido de un programa de seguimiento para determinar la eficacia de la rotenona y cualquier efecto secundario.

El proyecto incluye otros seis lagos de Aigüestortes y el Parc de l’Alt Pirineu en Aran, el Pallars Sobirà y la Alta Ribagorça. En ellos se eliminarán peces invasores hasta 2026 mediante procedimientos ya consolidados: pesca eléctrica, trampas y redes. El presupuesto del proyecto es de 4,7 millones de euros, de los que la UE aporta 2,8 millones.

Una sustancia que solo se ha usado una vez hasta ahora en Catalunya

El uso de la rotenona para erradicar peces invasores en los espacios naturales está implantada en algunos países como Estados Unidos y Noruega, pero tiene pocos precedentes en España y menos aún en Catalunya. Su aplicación está sujeta permisos especiales del ministerio de Transición Ecológica. El único precedente de su empleo en territorio catalán es muy reciente: tuvo lugar el pasado mes de abril en el Parc Natural del Delta de l’Ebre.

Técnicos de este espacio protegido, de la entidad Paisatges Vius y de la Fundació Andrena lo aplicaron en las lagunas de santes Creus, en l’Ametlla de Mar. Se utilizó para la eliminación de la gambusia, un pez invasor detectado por primera vez en el año 2006. Antes de aplicar la rotenona, hubo un rescate de peces autóctonos, que se devolvieron a las lagunas después de que se disolviera el plaguicida natural.

Carteles en el entorno advertían a los visitantes de que no tocaran el agua durante varios días, mientras esta sustancia estuviera activa. Todo ello se hizo en colaboración con una empresa especializada y con el apoyo de la Agència Catalana de l’Aigua (ACA).

Inventario piscícola en la Femosa Al margen del proyecto Life, otras iniciativas en Lleida velan por la protección de los peces autóctonos. Una de ellas es el inventario que la asociación ecologista La Banqueta de Juneda impulsó en marzo junto con el Ateneu Garriguenc y el Centre Excursionista Borges-Garrigues. Reveló numerosas especies autóctonas y foráneas pese al deterioro de la calidad del agua en el curso bajo.