MUNICIPIOS URBANISMO
Aplazada sin nueva fecha la subasta de suelo de Vallfosca
La liquidación de los activos del antiguo promotor, en suspenso || El precio de salida de los terrenos se consideraba excesivo
Imagen de archivo de un cartel de Fadesa en Espui.
La subasta de más de 70 hectáreas de suelo urbanizable en Espui, donde estaba prevista la construcción del resort turístico de Vallfosca hace más de una década, ha quedado aplazada sin nueva fecha. La puja para adjudicar estos activos de la inmobiliaria Martinsa Fadesa en el municipio de La Torre de Capdella se anunció el pasado mes de abril y debía celebrarse el 31 de mayo. Sin embargo, ha quedado en suspenso junto con las del resto de inmuebles que esta empresa había sacado a la venta en toda España, en el marco de un largo proceso de liquidación que se ha prolongado durante años.
Los terrenos de Vallfosca habían salido a subasta por 2,9 millones, una cifra que, según fuentes próximas al proceso de adjudicación, se consideraba muy superior a su valor actual. Lo mismo habría sucedido con el resto de activos de Martinsa. El portal en internet dedicado a vender estos inmuebles los ha retirado y la administración concursal no ha anunciado por ahora nuevas fechas para volver a subastarlos.Este es el cuarto intento fallido de adjudicar en subasta este suelo junto al pueblo de Espui, donde años atrás estaba prevista la construcción de hoteles y más de 900 viviendas destinadas a segundas residencias.
Las dos primeras pujas quedaron desiertas, mientras que la tercera se adjudicó a acreedores de la empresa en 2021, aunque finalmente la compraventa no se formalizó. Fuentes próximas a la operación lo atribuyeron al hecho de que la Generalitat redujo en 2020 la edificabilidad de los terrenos. Actualmente solo se permite en ellos la construcción de establecimientos hoteleros y comerciales cerca del pueblo.
A pesar de ello, la cuarta subasta se anunció con precios similares a las anteriores.En la zona se encuantra también un campo de golf, prácticamente terminado cuando Martinsa declaró en 2008 la mayor quiebra de la historia de España, con un pasivo de más de 7.000 millones de euros. La instalación, que nunca llegó a estrenarse, no formaba parte de los activos a subasta el pasado mes de abril.
