Los Bomberos intentan 'estrechar' al máximo el fuego en torno a Sant Mamet, para evitar que avance con la entrada de viento

Los Bomberos de la Generalitat centran este sábado las tareas de extinción del incendio de Baldomar, en Artesa de Segre (Noguera), al mitigar los efectos que puede tener la entrada de viento de sur cabe al mediodía.

Así, se trabaja en una carena, donde está la ermita de Sant Mamet, que queda alineada y donde el objetivo es "estrechar al máximo" la llama activa y que esta sea "la más pequeña posible" cuando empiece a soplar el viento en la zona. Otro foco que preocupa es un área discontinúa de bosque de dos kilómetros donde no hay campos de cultivo, entre el valle de Meià y el núcleo de Fontllonga, en Camarasa (Noguera). El incendio ya ha quemado cerca de 1.700 hectáreas y trabajan una setentena de dotaciones, 13 de las cuales son aéreas.

Por su parte, el jefe de soporte del operativo de los Bomberos de la Generalitat, Miquel López, ha dicho que centran las tareas en el tercio pendiente de trabajar que queda más arriba de la ermita de Sant Mamet. En este punto hay una carena que coincide con el límite de las 8.000 hectáreas de perímetro potencial que se había establecido y, por este motivo, se quieren invertir allí todos los esfuerzos.

López ha explicado que este sábado no se podrá estabilizar todavía el incendio, aunque trabajan para intentar que la superficie quemada no crezca más. También ha asegurado que la setentena de dotaciones que hay desplazadas a este fuego son las máximas de las que pueden disponer y que, en caso de un nuevo incendio, algunas tendrán que derivarse para poder atenderlo. Mientras, ha detallado que de las 13 de aéreas, diez están tirando agua y tres más se destinan a tareas de coordinación.

Aunque este sábado está prevista una bajada ligera de las temperaturas, la máxima preocupación de los efectivos es el viento. López ha dicho que espera que con las medidas de contención aplicadas a los macizos, con la activación del plan Alfa 3, la zona quede "limpia" para sólo tener que centrarse al atacar las llamas y contener el incendio. En este sentido, el cabo de los Agentes Rurales en Lleida, Llorenç Ricou, destaca su importancia de cara a paralizar la actividad y ha detallado que también se ha activado en la sierra de Prades y el Montsant.