METEOROLOGÍA TEMPORAL
Granizadas dañan fruta en el Segrià y rayos causan incendios en el Alt Urgell y la Noguera
Tormentas irrumpen en las comarcas leridanas tras meses de sequía y dejan hasta 45 litros por metro cuadrado || La Generalitat alerta de lluvias y fuertes vientos que deberán amainar a partir de hoy
Fuertes tormentas azotaron ayer las comarcas de Lleida después de meses de sequía extrema. Lo hicieron con granizo que provocó daños a la fruta en municipios del Segrià como Almacelles y Gimenells i Pla de la Font. También cayeron rayos que provocaron incendios en la Noguera y el Alt Urgell, aunque pronto se extinguieron: la lluvia que acompañaba a los relámpagos contribuyó a apagar el fuego.
Las precipitaciones, intensas y muy localizadas, dejaron hasta 45 litros por metro cuadrado. El granizo cayó de forma desigual a últimas horas de la tarde. Fue de tamaño pequeño y apenas ocasionó daños en localidades como Aitona, Llardecans y Sarroca de Lleida, según las primeras informaciones de la Associació de Defensa Vegetal (ADV).
En cambio, provocó desperfectos en la fruta en Almacelles y Pla de la Font. Allí el pedrisco tuvo un diámetro superior al de las monedas de un euro y hubo momentos en que llegó a alcanzar el tamaño de una pelota de tenis. Se pudo ver tanto en campos de frutales como en las calles de Almacelles y la cuantía de los daños está pendiente de calcular.Por su parte, los Bomberos de la Generalitat trabajaron ayer a mediodía en dos incendios causados por las tormentas.
Un total de once dotaciones acudieron a La Baronia de Rialb, en la zona de Pallerols, después de que un rayo impactara contra un árbol y se incendiara. Fueron alertados a las 12.21 horas y la misma tormenta facilitó la extinción del fuego. Pocos minutos después, a las 12.39 horas, otro rayo provocó también un fuego en una torre de alta tensión en el municipio Oliana, junto a la carretera C-14.
Las llamas se propagaron a una zona de vegetación, pero la situación no fue a mayores.La Generalitat mantenía para hoy la alerta ante la previsión de fuertes vientos y tormentas en las comarcas leridanas, si bien los pronósticos apuntan que el temporal amainará. Las lluvias no alteran por ahora la situación de sequía en las comarcas de Lleida, con escasas reservas de agua en los embalses y cada vez más ayuntamientos que aplican restricciones al agua potable y hacen llamamientos a los vecinos para que reduzcan el consumo.