Golmés urbaniza la Carretera Vella para evitar inundaciones en la zona

El ayuntamiento de Golmés ha adjudicado la segunda fase de urbanización de la calle Carretera Vella, tramo que discurre entre la urbanización El Pla y la rotonda de N-II, a la salida del municipio dirección a Bellpuig. Los trabajos, a parte de adecentar la zona, permitirán evitar inundaciones en el campo de futbol y vías adyacentes como la que se produjeron el 2019. Por este motivo, se instalará un sistema de recogida de aguas blancas (procedente de la lluvia) que se desviarán hacia el cauce del río Corb mientras que las residuales irán a la depuradora.

La empresa que llevará a cabo los trabajos es Romà Infraestructures i Serveis por un importe de 349.944 euros y un plazo de ejecución de cinco meses. Este proyecto cuenta con una subvención del PUOS 2020-2024 de 250.000 euros, tal y como explicó ayer el alcalde, Jordi Calvís. La primera fase de urbanización de esta vía se llevó a cabo en 2010.

La zona ha ido aumentado con los años el número de viviendas, por lo que era necesario urbanizar el espacio y solventar el problema de recogida de aguas. Los trabajos también incluirán habilitar un nuevo asfaltado, aceras y servicios. Por otra parte, el consistorio también ha adjudicado los trabajos para un carril bici en el camino entre Golmés y Mollerussa que se han adjudicado a Romà Infraestructures i Serveis por 239.700 euros y un plazo de ejecución de 4 meses.

Consiste en pavimentar este nuevo vial para bicicletas, instalar sistemas de drenaje y colocar señalización vertical y horizontal a lo largo de los dos kilómetros de este camino, que une las calles Comerç de Mollerussa y Solanes de Golmés. Una media de unos 300 vehículos y un centenar de ciclistas y peatones circulan cada día por esta carretera, según ha informado el consistorio.