Más recortes en los regadíos de Lleida por la sequía, que se agrava en el Noguera Pallaresa

La sequía persistente ha obligado a hacer nuevos recortes en los riegos de Lleida para salvar la campaña. La comisión de circulación de agua del Canal d’Urgell ratificó ayer una nueva reducción en la dotación de 1,5 metros cúbicos por segundo por lo que pasa a ser de 25,5 metros cúbicos por segundo en el Principal. Es la tercera limitación importante desde el pasado mes de julio (de 33 a 29, de 29 a 27, y esta última de 27 a unos 25), aunque se ha ido regulando a medida de las necesidades, indicaron fuentes del organismo.

También se han aplicado las mismas medidas en el canal Auxiliar por el que circulan unos 12,5 metros cúbicos por segundo cuando tiene capacidad para 18. De este modo, confía en salvar la campaña que acabará a finales de septiembre y tener agua para abastecer segundas cosechas de cereal y frutales de semilla (pera y manzana tardía), según explicó el presidente de la comunidad, Amadeu Ros. En la actualidad, los embalses de la cuenca del Segre, que se encuentra en estado de emergencia desde hace meses, almacenan 82 hectómetros cúbicos entre 36,2 de Oliana y los 45,9 de Rialb, al 11,3% de su capacidad.

No obstante, las precipitaciones de esta semana en la cabecera han hecho aumentar los aforos del río y la previsión de más lluvias hace prever que la situación mejore (ver claves).Por lo que respecta al Aragón y Catalunya, también ha aumentado el racionamiento del agua y lo ha rebajado de 0,48 litros por segundo y hectárea hasta 0,45. Mantendrá esta medida hasta el final de la campaña, que se prevé “dificultosa”, según indicó su presidente, José Luis Pérez. También se mantiene el desvío de caudal a la zona alta del área regable, en la Franja oscense, a través del retrobombeo desde Coll de Foix, en Alfarràs.

Comenzó a finales de junio y se mantendrá hasta finales del mes próximo, remarcó. En cuando a Pinyana, su presidente, Ramon Piqué, indicó que la dotación se ha reducido por lo menos un 30% respecto a la total (11,4 metros cúbicos por segundo) y que por el Principal circulan ahora entre 8 y 10. Pinyana ya ha extremado el control del consumo con vigilancia nocturna y ha advertido que multará a los agricultores que rieguen por la noche.La cuenca del Ribagorçana, que abastece a Pinyana, al Aragón y Catalunya y al Algerri-Balaguer, está en prealerta dadas las escasas aportaciones en los pantanos.

Estos siguen bajando de nivel, en especial Canelles, que está al 35% de su capacidad. Por los mismos motivos la cuenca del Pallaresa ha entrado en situación de alerta: tanto el embalse de Talarn como de Camarasa tienden a la baja en sus reservas al no registrase nuevas entrada de caudal.