La sequía pone en jaque un proyecto turístico para navegar en Rialb que subvenciona la UE

La sequía que ha dejado el pantano de Rialb a solo el 6,8% de su capacidad pone en jaque un proyecto turístico subvencionado por la UE para navegar en el embalse. Lo promueve el Consorci Segre-Rialb, que el pasado diciembre obtuvo 2,5 millones de euros del fondo Next Generation. Su propuesta incluye convertir el pantano en una estación de deportes náuticos, desplegar ocho embarcaderos en sus orillas y adquirir un barco de 50 plazas impulsado con energía solar para recorrerlos.

Ahora la entidad estudia si es viable hacer todo esto dentro del plazo otorgado para completar los trabajos, que expira a finales del año 2024. Así lo corroboraron ayer fuentes del consorcio, que puntualizaron que, si la sequía acaba haciendo inviable la propuesta original, cabe la posibilidad de solicitar un cambio de uso que permita conservar la subvención ya otorgada. Además de actividades acuáticas, el proyecto incluye otras para impulsar el turismo activo en tierra firme.

Entre ellas destacan un centro de tecnificación de escalada en Peramola, un parque de aventuras familar en Ogern y miradores en Oliana. En Tiurana está previsto un mirador astronómico y, precisamente, el ayuntamiento sacó ayer a concurso un punto de recarga con energía solar para coches y bicicletas eléctricas, con un presupuesto de 75.917 euros.“Nadie podía imaginarse que llegaríamos a este nivel de sequía”, afirmó la presidenta del Consorci Segre-Rialb y alcaldesa de Oliana, Carme Lostao. Ante la actual escasez de agua y la incertidumbre sobre qué sucederá en los próximos meses, Lostao considera que evaluar la viabilidad de las actividades previstas en el pantano “es un planteamiento que debemos hacer”.

“Nuestro proyecto turístico está concebido a largo plazo, también para las futuras generaciones, y tenemos que considerar los diferentes escenarios posibles”, remarcó. La revisión del proyecto turístico en las aguas de Rialb y su entorno llega cuando el pantano ha alcanzado el nivel más bajo desde su construcción. Esto ha hecho emerger los restos del antiguo pueblo de Tiurana por primera vez en 15 años.

La sequía que mantiene en estado de emergencia la cuenca del Segre se da también en el resto de Lleida y de Catalunya. En la cuenca del Noguera Ribagorçana, las reservas del pantano de Canelles han descendido a un 33%, algo que impide desde hace más de un mes la navegación.

Las reservas de toda la cuenca del Segre no llegarían a llenar Oliana

Los pantanos de la cuenca del Segre, en estado de emergencia, almacenan poco más de 60 hectómetros cúbicos que tendrán que administrar, si no llueve, hasta que finalice la campaña de riego el mes que viene.

Oliana, el más pequeño, acumula 34,4 hectómetros cúbicos y está al 40,8% y Rialb, con 27,4, está al 6,8%. Con estas cifras, el Canal d’Urgell tendrá que volver a reducir dotaciones como viene haciendo desde hace semanas. Muchos regantes creen que habrá recursos hasta mediados de septiembre si se distribuyen bien, ya que la campaña de riegos, tanto para cereal como fruta tardía, está ya en su recta final.

Los abastecimientos están asegurados con las reservas que ahora hay, ya que las de Rialb son para regadíos y Oliana para agua de boca. Los pantanos del Ribagorçana continúan a la baja y Canelles, con 228 hectómetros cúbicos, está al 33%. También prosigue la tónica de descenso en su nivel.