AGUA ESCASEZ
Lleida té la producció hidroelèctrica més baixa en vint anys
Endesa baraja cerrar centrales en un mes, tras haber parado Acciona la de Rialb
La sequía ha provocado la mayor caída de la producción hidroeléctrica en Lleida en más de veinte años en las centrales de Endesa, principal concesionaria en la provincia. La compañía corroboró que baraja cerrar o reducir la actividad de algunas de sus centrales a partir de septiembre, después de que Acciona haya parado ya la de Rialb.
La producción hidroeléctrica de Lleida en lo que llevamos de año es ya la más baja en más de dos décadas como consecuencia de la sequía. Así se desprende de los datos de Endesa, la principal concesionaria de centrales en la provincia.
La compañía indicó que la generación conjunta de todas sus instalaciones leridanas entre los meses de enero y julio es la menor desde 2001, fecha a la que se remontan los primeros registros de la empresa. La situación es similar a la del conjunto de Catalunya, mientras que en España este ya es el peor en los últimos treinta años, según datos publicados por el ministerio de Transición Ecológica. Las centrales de Endesa en Lleida han producido entre enero y julio un 18% menos de electricidad que el año pasado y un 35% menos que la media de la última década (como avanzó SEGRE el 5 de agosto).
Ante la escasez de agua en los embalses, Endesa baraja la posibilidad de parar o reducir la actividad de algunas de sus centrales a partir del próximo mes de septiembre. Es algo que el grupo Acciona ha hecho ya en la del embalse de Rialb, a solo el 6,4% de su capacidad y en continuo descenso. Por ahora esta es la única instalación hidroeléctrica parada por la sequía en las comarcas leridanas, según datos de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE).Endesa estudia paralizar o reducir la actividad de la central hidroeléctrica de Camarasa una vez finalice la temporada de riego en septiembre, si para entonces la sequía no ha remitido.
La cuenca del Segre está en estado de emergencia por la escasez de agua y el Canal d’Urgell, que toma el caudal de Oliana y Rialb, ya ha reducido la dotación a sus regantes en varias ocasiones a lo largo de este verano.Al margen del Segre, la compañía eléctrica valora también la posibilidad de extender los cierres y reducciones de producción a partir de otoño a la central de la presa de Sant Antoni, en la cuenca del Noguera Pallaresa; y también a las de los pantanos de Escales, Canelles y Santa Ana, en la del Noguera Ribagorçana. Asimismo, baraja reducir el caudal de canales como el de Seròs en coordinación con la CHE.
De navegar a recorrer a pie el fondo seco de grandes embalses leridanos
Las reservas del pantano de Canelles han caído de forma progresiva hasta situarse en un 33% de su capacidad. La escasez de agua impide la navegación desde hace más de un mes, y hace que lugares que, hasta hace poco, eran únicamente accesibles a bordo de embarcaciones ahora solo se puedan visitar a pie, recorriendo el lecho seco del pantano. Es el caso del paraje conocido como la muralla de Finestres. Imágenes de la aplicación Google Maps muestran el aspecto que presentaba en el año 2015 frente al actual: está completamente seco y solo la marca horizontal que dejó el paso del agua en el paisaje evidencia que este espacio forma parte de uno de los grandes pantanos del Pirineo.Si bien la sequía ha interrumpido parte de la actividad turística ya establecida en Canelles y su entorno, también ha atraido a unos visitantes inesperados: personas que acuden a lugares hasta hace poco cubiertos por las aguas de los pantanos.
Forman un “turismo de sequía” que en Lleida ha podido verse este verano en Rialb. El retroceso de las reservas hasta poco más del 6% de la capacidad del embalse ha hecho emerger los restos del antiguo pueblo de Tiurana, y desde entonces han ido recibiendo visitas de personas sin vínculos con el municipio, atraídas por la curiosidad.