Se reanuda el derribo de los dos bloques que todavía quedan del Grupo Sant Isidori de Mollerussa
En junio se detuvieron porque había nidos de golondrinas y ahora se prevé que antes de acabar el año el solar quede limpio
Los trabajos para acabar con el derribo de los dos últimos bloques del Grupo Sant Isidori de Mollerussa han empezado este martes después de un paro temporal que se hizo en junio al detectar la presencia de nidos de golondrinas, que son aves protegidas. Una máquina retroexcavadora ha empezado a tirar al suelo tejados y paredes de estas casas que se promovieron en los años 50 del siglo pasado. Había un total de 4 bloques declarados en ruina y al 2017, Ayuntamiento y Generalitat iniciaron el proceso de desalojo de los inquilinos para reubicarlos en otras viviendas e iniciar el proyecto de derribo. El alcalde Marc Solsona calcula que antes de finalizar el año el solar ya estará vacío.