Queja ante el CGPJ de un imputado por la muerte de Cachou
El cadáver del oso Cachou, hallado el 9 de abril de 2020.
A.M.G., agente de Medio Ambiente del Conselh d’Aran y uno de los principales investigados por la muerte por envenenamiento del oso Cachou en abril de 2020, ha formulado una queja ante el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) por el “funcionamiento anormal en el tiempo de la administración de justicia (absoluta paralización e inactividad injustificada), comportando dilaciones indebidas así como la violación del derecho a la tutela judicial efectiva”.
Su abogado, Enric Rubio, de Rubio Advocats, ha presentado esta semana un escrito en el que alega que se ha producido “una paralización absoluta del procedimiento”. A A.M.G., que fue detenido por los Mossos y siempre ha negado cualquier participación en la muerte del oso, le incautaron objetos personales y de sus familiares que todavía no le han sido devueltos pese a que la Fiscalía se mostró conforme a la devolución.
Esta inactividad, según Rubio, “atenta contra el derecho a la tutela judicial efectiva de mi representado por la absoluta paralización e inactividad injustificada del presente caso”. Otra alegación trata las dilaciones indebidas injustificadas y recuerda que no se ha producido “ninguna conducta entorpecedora u obstructiva en el funcionamiento de la Administración de Justicia”.
En este sentido, lo último que ha trascendido del caso, como ya publicó SEGRE el pasado abril, es que el juzgado de Vielha atribuye la muerte por envenenamiento del oso Cachou a solo dos personas.
