SERVICIOS ABASTECIMIENTOS
Almenar veta beber agua del grifo al encontrar mercurio en una fuente
En muestras tomadas en la que hay en la plaza Onze de Setembre || El consistorio investiga las causas de la aparición del metal y la Diputación hace más pruebas
El ayuntamiento de Almenar prohibió ayer a través de un e-bando beber o cocinar con agua del grifo tras encontrar rastros de mercurio en una muestra recogida por técnicos de la Diputación. Según la alcaldesa, Teresa Malla, la muestra de agua se tomó en la fuente de la plaza Onze de Setembre, recientemente inaugurada, y de inmediato se cortó el suministro a la población, que ha celebrado la Festa Major desde el pasado viernes hasta ayer lunes. También se dio aviso urgente a la Mancomunitat d’Aigües de Pinyana, a la que está conectada para el suministro de boca, pero el organismo descartó una afectación en la tubería general y varios alcaldes del Segrià consultados que también utilizan dicho servicio constataron no tener problemas de abastecimiento.
Todo apunta a que la problemática se centra en la red municipal que gestiona el consistorio de Almenar. Según Malla, la Diputación procederá hoy a hacer nuevas analíticas en varios puntos. El ayuntamiento baraja varias hipótesis.
Puede que los restos del metal procedan del depósito general, de alguna conducción en mal estado o de alguna captación afectada por la sequía. “Estamos barajando todas ellas aunque, en realidad, no sabemos la causa concreta que lo puede generar”. Malla indicó que el suministro no se restablecerá hasta que se tenga la total seguridad de que no hay restos de mercurio en la red de abastecimiento y hasta que las pruebas de la Diputación y Salud lo corroboren.
Hasta entonces, los vecinos tendrán que beber agua embotellada.
Verano de problemas por sequía, vertidos y turbidez
Este verano ha sido complicado por los problemas en el abastecimiento a numerosos municipios. Pueblos de La Mancomunitat d’Aigües de Les Garrigues no pudieron beber del grifo 19 días de junio en los que se vieron obligados a recurrir a las cubas y al agua embotellada por el alto índice de pesticidas en los depósitos y el pantano de Utxesa, de donde captan.
Los más de 2.000 vecinos de Torres de Segre, con la toma en el Canal de Seròs, recuperaron el servicio a primeros de agosto. Además, la sequía obligó en julio a poblaciones como la Curullada y Maldà a recurrir a las cubas para abastecer a los vecinos. Maldà prohibió regar huertos y jardines.
Pueblos del Pirineo también han sufrido problemas en el suministro y han tenido que aplicar restricciones como es el caso de Bellver de Cerdanya o Gerri de la Sal, mientras que otros han tenido que recurrir a los camiones cisterna para asegurar el suministro como sucedió en Peramea, Castilló de Tor, Castell de Mur o Sant Esteve de la Sarga.A finales de agosto, una decena de municipios del Urgell y el Pla recomenzaron no beber agua del grifo por problemas de turbidez en el Canal d’Urgell. Agramunt fue uno de los que padeció este problema junto otras localidades del Pla, además de Vilagrassa y Estaon, en la Vall de Cardós.